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-Antes de entrar directamente en el tema, quisiera que responsa, por sí o por no, si levantaría la mano para votar por la reforma previsional.

-Sí, nosotros vamos a acompañar el proyecto del Ejecutivo.

-¿Cuál es su argumento por el sí, ante una iniciativa tan cuestionada?

-Entiendo que el proyecto que se aprobará es superador a lo que existe en la actualidad, sobre todo en el cálculo de actualización de haberes de los jubilados para los próximos tiempos. Actualmente, las jubilaciones se actualizan cada seis meses, de acuerdo a la recaudación en el país; se venía haciendo así porque el Indec no era creíble para actualizar conforme a la inflación. La nueva fórmula deja de lado la recaudación y pone como método de cálculo la inflación del trimestre de actualización, teniendo en cuenta la inflación en un 70% y la variación salarial en un 30%: eso significará para los jubilados mantener su haber en el tiempo, acorde a la inflación. Nosotros entendemos, y así lo indican los números, que cuando finalice 2018, como la inflación está en baja, representará una mejora dentro de 4 ó 5 puntos del haber jubilatorio.

La cuestión de discordia surge por la transición de un método de cálculo a otro, a darse en el mes de marzo. Si se aplica la actualización nueva, todos estiman que podría ser menor a lo que hubiera correspondido a que si se aplicara la fórmula vigente. Eso generó serios cuestionamientos a este proyecto, que viene con media sanción del Senado a la Cámara de Diputados y que forma parte de un pacto del gobierno nacional con los gobernadores. Nosotros dentro del bloque observamos lo mismo y estamos dispuestos a resolverlo: si en marzo se genera tal diferencia, el Estado nacional garantizará esos fondos a los jubilados, de manera que nadie cobre menos de lo que hubiera cobrado con la antigua fórmula.

-De ser todo tal cual usted lo explica, ¿advierte algún error de comunicación por parte del gobierno o por qué esta iniciativa causa tanto repudio?

-Estamos viviendo momentos difíciles en los que la política siempre mete la cola. Aún sabiendo que el gobierno va a resolver la diferencia que se puede presentar en marzo, hubo una gran movilización de parte de sectores de la izquierda y de grupos anarquistas, que fueron con la intención de hacer daño. Había pocos jubilados planteando sus dudas y pocos de los que se acercaron estaban en defensa de las jubilaciones, sino para intentar generar una situación de caos que pueda complicar en términos políticos al gobierno. Esa misma situación se dio dentro del Congreso, con diputados que parecían más patoteros de barrabravas de fútbol, que legisladores trabajando en la casa de la democracia manifestando sus posiciones. El gobierno pudo haber errado en la comunicación de en qué consista la modificación, pero la certeza que quiero transmitir es que el nuevo método a utilizar a partir de marzo será mejor que el actual para actualizar los haberes de los jubilados, para que no tengan ningún tipo de pérdida en su poder adquisitivo.

-¿Cuál es la urgencia del gobierno nacional en que el proyecto se trate en sesiones extraordinarias o salga por decreto de necesidad y urgencia, como se solía hacer durante el kirchnerismo?

-La urgencia radica en que esta reforma es parte de un paquete de leyes, a partir del consenso amplio firmado por el presidente y los gobernadores, que incluye también las reformas tributaria y fiscal. Debe estar aprobado de manera que cuando comience a ejecutarse el nuevo presupuesto, estén todos los instrumentos legales sancionados. Fundamentalmente, estos cambios beneficiarán a las provincias con mayor asignación de recursos para que puedan comenzar a atender las difíciles situaciones financieras, que en el caso de Entre Ríos las estamos viendo a través del déficit que afronta el gobierno. Este pacto permitirá que el gobierno nacional envíe los fondos para atender el déficit más de 5 mil millones de pesos que la Caja de Jubilaciones de la provincia tendría a fin de 2018, lo que daría tranquilidad a los pasivos entrerrianos.

-¿Para cuándo una modificación del cálculo de actualización a jueces y legisladores?

-La fórmula de los legisladores está atada al incremento que reciben los empleados del Poder Legislativo. No es cierto que los legisladores fijamos nuestros salarios ni los aumentos, sino que se generan en el mismo porcentaje en que se logran las paritarias de los empleados legislativos. Y el Poder Judicial tiene también su propio régimen. Hay varios proyectos dando vueltas y yo presentaré uno propio los próximos días, para que en el país no existan algunas jubilaciones de privilegio; es injusto que algunas personas, por haber cumplido una función muchas veces en forma temporaria, terminen cobrando beneficios jubilatorios de privilegio, que están largamente por encima de los salarios mínimos que cobra la mayoría de los jubilados.

-Volviendo a lo que ocurrió el jueves en el Congreso, ¿cómo evalúa el operativo dispuesto por el Ministerio de Seguridad?

-Creo que hubo un procedimiento acorde a lo que se veía en la instancia previa. Yo había estado el martes participando en reuniones de comisión, donde se terminó dictaminando este tema, y ya había en el interior del Congreso un grupo importante de personas que nada tenían que hacer ahí. Ante cada intervención de los ministros que estaban presentes, eran abucheos, insultos y agravios, como así también cuando algún legislador pedía la palabra para defender el proyecto. No así cuando hablaban los del Frente para la Victoria, que resultaban ovacionados cuando no entonaban cánticos a favor de Amado Boudou, justamente una persona que causó un enorme deterioro en la Anses durante su gestión.

-¿Notó la presencia de "diputruchos", como se ha dado en llamar a dos personas que aún no habían asumido e igualmente se presentaron en el Congreso?

-De ninguna manera, no hubo ningún diputrucho. Había cuatro diputados para asumir ese día, que se los ve en las filmaciones detrás del presidente de la cámara, a la espera de ser convocados a tomar juramento cuando comenzara la sesión y luego ubicarse en sus bancas. Todos los diputados que estaban en las bancas son legisladores que legítimamente están ocupando el cargo, aparte de existir un listado oficial con todos los que dieron quórum.

-¿Le hace temer por la gobernabilidad toda esta situación generada, justamente en un mes históricamente tan sensible como es diciembre?

-A mí me parece que no, porque hay una amplia mayoría democrática que este lunes sesionará para aprobar esta reforma. El otro día en el Congreso había una amplia mayoría que estaba dispuesta a acompañar esta ley, pero no se pudo por el patoterismo de algunos diputados. Hay mucha gente nerviosa, sobre todo por lo que vino ocurriendo los últimos meses en la Justicia, en la que muchos funcionarios del gobierno anterior están en prisión y hay otros que temer ir por el mismo camino. Vamos a seguir trabajando para generar los cambios que creemos necesarios para poder vivir en un país federal, en el que se ejecuten obras que permitan una mejor calidad de vida para los vecinos.
Fuente: El Entre Ríos (Edición Impresa)

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