En esta nueva etapa, se lanzará una convocatoria a la población a través de la campaña #MOVETEVOSLASPLANTASNO a informarse y comprometerse en frenar la dispersión de la enfermedad. En este sentido, durante la temporada de verano se estarán implementando campañas de prevención en varios puestos de control y sanidad en el NOA y NEA con el objetivo de evitar el traslado de plantas o sus partes tanto fuera o dentro del país sin certificación. Las mismas acciones también serán divulgadas en las redes sociales oficiales de Senasa y Federcitrus.
Esta campaña pone foco en la importancia de adquirir plantas cítricas certificadas, con el objetivo de evitar el ingreso y dispersión del HLB a través de plantas cítricas y sus partes provenientes de países limítrofes de manera ilegal y carente de controles sanitarios.
El HLB afecta a todos los cítricos, como limón, naranja, mandarina y pomelo; y a la planta ornamental Murrayapaniculata, conocida como Mirto o Jazmín Arabe, cuya producción, transporte y comercialización se encuentra prohibida en todo el territorio nacional (Res. SENASA Nº 165 de 2013).
La amenaza ya se encuentra presente en la provincia de Misiones, en los departamento de Ituzaingó y Alvear (provincia de Corrientes), Pilcomayo y Formosa (provincia de Formosa), Federación (provincia de Entre Ríos), Independencia (provincia de Chaco) y La Banda (provincia de Santiago del Estero).
El sector da empleo a más de 100 mil personas en 12 provincias, y se constituye como una de las piezas más importantes del sector agroalimentario nacional, destinada a consumo interno, la industria y la exportación. Es importante saber que, por su parte, China, Estados Unidos, México y Brasil han sufrido daños importantes en sus respectivos cultivos.
Los cítricos tienen un valor preponderante para nuestro país, no sólo porque el sector contribuye al desarrollo económico sino porque a través de sus productos, aporta beneficios a la dieta de los argentinos, cuyo consumo promedio de cítricos por habitante es de casi 19 kilos al año, aportando vitaminas y minerales, protección al sistema digestivo, control de los niveles de colesterol, reducción de los riesgos de enfermedades cardiovasculares.
Por lo tanto, todos los eslabones que intervienen en la cadena de producción, desde el productor al público en general, deben contribuir desde su lugar trabajando juntos para la prevención de esta enfermedad.
