Los uniformados llegaron al lugar alertados por un llamado telefónico. Al identificar la gravedad del cuadro, el funcionario oficial ayudante Marcelino Páez decidió no esperar la llegada de la ambulancia y trasladar rápidamente a la joven al Hospital Centenario, realizando las primeras maniobras de RCP arriba del móvil policial.
Tras llegar al nosocomio con vida el médico que la recibió manifestó que el estado era de gravedad por lo que continuaron con la práctica de reanimación.
Desde la Policía sostienen que no está permitido subir a patrulleros, pero a veces el riesgo lo toman los policías frente al cuadro de desespación de las personas con algún problema grave de salud.
Ante el fiscal interviniente, el policía declaró que “tomó la decisión de subir al móvil policial a la persona que se encontraba en situación delicada sin dar intervención a la ambulancia porque el objetivo era salvarle la vida”.
