Cuando por fin llegó, no lo dudó y se inscribió junto a más de 20 jóvenes. Finalmente, logró “recibirse” con otras tres compañeras aspirantes.
Y es gracias a este sueño que un compañero de trabajo de la joven, también bombero, se recupera –tras varios días de internación en Gualeguaychú– de un accidente laboral que pudo haberle costado la vida.
Todo ocurrió este martes, en una granja de cerdos ubicada en un camino vecinal que conduce a Talitas. Allí, la joven de 25 años, que también es Técnica en Higiene y Seguridad Industrial, pudo aplicar las técnicas de reanimación cardiopulmonar que fueron claves para sacar del trance de fibrilación cardíaca a Iago Torres, un compañero que había sufrido una descarga eléctrica mientras operaba una hidrolavadora.
El accidente
Macarena contó cómo fue que pudo asistir a su compañero, que cuando comenzó con las maniobras de reanimación se encontraba sin pulso y sin respiración.Fue otro obrero de la empresa quien le avisó sobre el accidente. Afectado por la desesperación, solo pudo pronunciar “Iago, paro”; pero fue suficiente para disparar la reacción de la joven bombera, que corrió hasta el galpón contiguo para comenzar a asistir al joven, desvanecido y con muy pocas señales vitales. En ese momento el joven estaba siendo socorrido por el encargado de la granja, que no lograba reanimarlo.
Los masajes y la maniobra “frente-mentón” que le practicó la joven, en la tercera sesión, lograron regularizar el ritmo cardíaco y que recuperara el pulso y la respiración, tras lo cual, con la ayuda del personal, fue subido a una camioneta y trasladado rápidamente al hospital de Larroque.
Luego del paso por el San Isidro, el joven fue trasladado a una clínica de Gualeguaychú y, según sus familiares, está pendiente el resultado de un estudio y luego le darían el alta.
“Gracias a Dios tenemos héroes sin capa”
Belén, hermana de Iago, comentó en su perfil de Facebook: “Gracias a Dios tenemos en nuestra ciudad héroes sin capa, en este caso Macarena Barrios gracias infinitas por salvar la vida de mi hermano”.Iago volvió a nacer gracias a su compañera de trabajo y colega de pasión y es testimonio, gracias a Dios, vivo, de la importancia de aprender una técnica tan simple, como importante.
