Desde entonces, integra una bancada pequeña pero determinante, con cinco legisladores hasta diciembre y tres en la actualidad, junto al correntino Carlos “Camau” Espínola y la cordobesa Alejandra Vigo.
Entrerriano y peronista, reniega del kirchnerismo y factura a José Mayans la derrota del justicialismo en el reparto de las comisiones que les causó Victoria Villarruel apenas asumió y contó la ayuda clave de su bloque.
“Designar autoridades y poner en funcionamiento el Senado fue fundamental para quitarle argumentos a Milei en su defensa del DNU”, sostiene.
A continuación, la reproducción textual de una entrevista realizada por Pablo Dipierri para La Política Online.
-¿Cómo ve al país, a un mes de del nuevo gobierno?
-Me preocupa la situación política, institucional y social del país, por las medidas que se vienen tomando o se proponen tomar, teniendo en cuenta el DNU y el proyecto de Ley Ómnibus. El presidente ha iniciado su gestión de espaldas al Congreso y ha continuado con comentarios y afirmaciones agraviantes contra el Poder Legislativo, lo cual no me parece acertado. Nosotros, sin embargo, en el Senado -y me refiero al bloque de Unidad Federal, con Camau Espínola y Vigo- hemos tomado la decisión de no obstaculizar de arranque un gobierno que ha sido recientemente votado por el 56 por ciento de los argentinos.
Creemos que el Congreso tiene que funcionar. Cuando hicimos la sesión en diciembre, que fue cuestionada por mis compañeros de Unión por la Patria (UxP), hablé con Mayans y le dije no comparto la estrategia que han usado. Primero, exponer al peronismo a una derrota, en la primera de cambio, me parece un error estratégico. Facilitarle a todos los diarios una tapa donde diga que el peronismo perdió contundentemente en el Senado para mí fue un error de estrategia política. Y además porque facilitarle a Milei la tarea impidiendo que el Senado se constituya y pueda funcionar también es un error. Fíjese que Milei saca un DNU y la verdad que no tiene fundamentos para sostenerlo. En cambio, si nosotros hubiéramos tomado la actitud que tomó el bloque UxP, el Senado no hubiera podido funcionar hasta febrero, Milei tendría un argumento legal fuerte: tengo que emitir un DNU porque no se puede legislar hasta febrero y tengo que gobernar.
-Usted preside Asuntos Constitucionales. ¿Qué piensa del decreto y la Ley Ómnibus?
-Yo fui uno de los primeros en expresarme en contra del DNU. Considero que es abiertamente inconstitucional. Avasalla el Poder Legislativo, pone al país, muchos ciudadanos y al Estado mismo en un riesgo. Si es rechazado por el Congreso, si la comisión de DNU se expide y ambas cámaras lo rechazan, tiene efecto a partir del rechazo hacia adelante, pero lo actuado anteriormente es válido. En cambio, si se expide la Corte y lo declara inconstitucional, es nulo a partir de su gestación. Hay acciones jurídicas que se emitieron en el transcurso y quedan nulas. Eso va a producir problemas en la vida particular, empresaria y en el Estado.
-¿Sería preferible que se expida la Corte antes que el Senado trate el decreto?
-Creo que sí. Porque es inconstitucional. Va en línea con la actitud que ha tenido el presidente, desde que asumió de espaldas al Congreso. Al hacerlo, dio un discurso en la explanada, un locutor les dice a los legisladores, la Corte y los gobernadores que se queden sentados viendo una pantalla, fue una falta de respeto absoluta.
Después, vienen las agresiones contra los legisladores, acusándolos. Y luego manda un DNU y la Ley Ómnibus, queriéndose adjudicar superpoderes. Yo lo que digo es que manden un proyecto de reforma constitucional y debatimos si queremos monarquía o no. Desde ese punto de vista, tengo que ser claro: me opongo al DNU y habrá que ver qué es lo que llega de la Ley Ómnibus. Lo tiene que tratar Diputados y todavía no hay acuerdo. Lo que sí le puedo decir es que hay muchos asuntos que no vamos a acompañar.
-¿Por ejemplo cuáles?
-La delegación de poderes y la utilización indiscriminada para privatizar a sola firma. Acuerdo con que el Estado a veces no es eficiente en administrar algunas cosas. Ahora, si decimos que somos eficientes, una buena manera de demostrarlo es administrar el Estado eficientemente. No podemos glorificar que si el Estado es ineficiente, vamos a privatizarlo.
-¿Cómo se pararía Unidad Federal frente a retenciones y la derogación de la fórmula jubilatoria?
-Hablo en modo personal. Es muy difícil evaluar cuando uno tiene que votar así.
-Milei acusa a los legisladores, en especial a los aliados, de coimeros- ¿Distinguiría la forma de dirigirse de Milei al Congreso con la Victoria Villarruel? ¿Ha tenido trato con ella?
-He tratado con ella pero, además, tiene una actitud distinta. En mi caso particular, presido la comisión de Asuntos Constitucionales, que es la más importante del Senado. Y yo, como oposición, la estoy presidiendo. Ya por sí mismo es un gesto de apertura y también de tener la claridad de que, si tenés siete senadores, necesitás consenso y acuerdo para poder funcionar. Creo que Milei no está viendo que para gobernar también le falta ese nivel de acuerdo y consensos con los propios gobernadores, que sé que se están quejando porque no hay ninguna posibilidad de sentarse a acordar cómo resolver cuestiones provinciales.
El presidente tiene que gobernar para todos. Si La Rioja tiene un problema y está emitiendo cuasimonedas, debería intervenir allí. Aparte es un reclamo genuino de La Rioja, por 1,5 puntos de coparticipación que se le adeudan históricamente.
Hay un desprecio hacia las necesidades del interior del país y el 56 por ciento de los votos no fue para eso. Milei no tuvo ese porcentaje por su propuesta electoral. Tuvo un porcentaje en las generales, un 29,8 por ciento. En ese porcentaje hay un alto componente de malestar hacia la política. De ahí al 56 hay un componente antiperonista, que no quiso votarlo a Massa, no quiso continuidad. Ahí están los votos de Patricia Bullrich, que en la campaña electoral denostaban la propuesta de Milei. Pero en el balotaje primó el cambio. Por eso Milei llega al 56 por ciento pero no está para hacer esto. Si el presidente cree que tiene el 56 por ciento para hacer esto, está equivocado. Tiene un error de lectura importante en cuanto a lo que la gente quiere hacer...
-¿Villarruel quiere hacer algo distinto a lo que hace Milei?
-No sé si quiere hacer algo distinto. Está haciendo lo que debería hacer Milei. En su ámbito de funcionamiento, que es el Senado, está construyendo consensos para que el Congreso funcione. Funcionando el Congreso, Milei no puede decir que necesita gobernar por decreto porque el Congreso no trabaja. Nosotros hemos garantizado que el Senado esté funcionando. El primer tema que mandaron era boleta única, lo teníamos que tratar. Lo tratamos el 3 de enero y el 10 de enero sacamos dictamen. Unánime. Ha habido posiciones pero todos quieren boleta única.
-Pero se dijo que el kirchnerismo votó el dictamen de minoría para trabar en el recinto la aprobación...
-No. Acá el 100 por ciento de los integrantes de las dos comisiones votaron boleta única. Esa es la verdad de la milanesa. Lo demás es chamuyo. A hacerse cargo. Cuando armé el bloque Unidad Federal, salieron a decir “ah, se fue del peronismo”. No me voy del peronismo. Era una estrategia legislativa, para sacar la Ley de Tarifas, que salió con fórceps.
-También le pasan factura por haber compuesto la mayoría de 39 contra 33 cuando se armaron las comisiones. Y desde el kirchnerismo han sido duros con usted, diciendo que encima termina presidiendo Asuntos Constitucionales. ¿Qué respondería?
-Que si UxP creyó que oponerse a la composición del Senado para que pueda funcionar era una buena estrategia, fue un error grave. Expusieron al peronismo a una derrota contundente. Ni siquiera juntaron 33 votos, porque fueron 29. No podés hacer eso. Le dimos la herramienta para que se nos rían. Una derrota innecesaria porque ni siquiera estábamos discutiendo un proyecto de ley. Si usted me dice que estamos discutiendo la privatización de YPF, acepto todo. Si estamos discutiendo las autoridades de la Cámara, no.
Aparte no hay que ser hipócritas. Se cansaron de llamarme porque lo que querían era poner autoridades. Como no tuvieron el número, quisieron bajar la sesión. Yo le dije a Mayans: “Le erraron la estrategia”. Aunque yo hubiera votado con UxP, no llegábamos de ninguna manera. La explicación que me dio Mayans fue: “Sí, pero queríamos exponerlos a ustedes”. Ah, bueno. Estamos en la chiquita, hermano. El peronismo necesita otra cosa. Con esa visión, el bloque está dividido. Podríamos haber estado en el bloque UxP, no hubiéramos roto nunca, si hubiera habido otra actitud.
-Durante la campaña electoral de Massa, se hablaba de que el bloque del peronismo podía llegar a tener 39 o 40 senadores. ¿Necesitaba un jefe como Massa el peronismo para esa articulación o se puede volver a reconstituir?
-Necesitaba un jefe como Massa. No obstante, yo escuché lo mismo después que se perdieron las elecciones. Por supuesto acompañé a Massa en Entre Ríos. Aún después de haber perdido las elecciones, seguí escuchando eso hasta días antes de la primera sesión. El tema es que si vos afirmás y le decís a alguien que puede ser tu jefe político o tu jefa, puede ser Cristina (Kirchner) o algún jugador más, que tenés 39 votos y no hablaste con nadie, de dónde sacaste eso...
-¿Con usted no hablaron?
-Jamás. Nadie me vino a decir “cuchame, vamos a reconstruir”. Arrogarse tener 39 o tener 35, no sé quién vende eso y quién compra.
-¿Cómo se recompone el peronismo?
-El peronismo necesita modernizarse. Usar la palabra renovación es hasta trillado. Renovarse no significa tirar algo por la ventana, necesita a todos. Hoy está totalmente afuera del radar de muchos jóvenes, que votaron a Milei. En la anterior no estaban votando al peronismo. No está haciendo un buen trabajo con jóvenes desde hace décadas el peronismo y hoy pagamos las consecuencias, sumado a que a veces te juega en contra la economía y, cuando te juega mal la economía, te lleva puesto.
-¿Es con Massa, con Llaryora, con Quintela esa recomposición?
-Es con Massa, con Llaryora, con Quintela. Sí, sí. Con muchos otros dirigentes, no tenemos que excluir a nadie. Lo que tenemos que ponernos de acuerdo es si queremos ir para ese lado, si queremos modernizar al peronismo, si queremos convocar a los jóvenes o si nos dedicamos a la chiquita, si estamos mintiéndonos entre nosotros, si estamos pensando en venir al Congreso y exponer a los otros a ver qué votan en vez de preocuparse por cómo recuperamos el peronismo. Por ese camino no va a pasar nada. Vamos a seguir así. Hoy Massa puede tener un rol importante en esta tarea. Estoy seguro que coincide con este pensamiento. Después hay que ver cómo se articulan las piezas.
-¿Hay que renovar las autoridades del PJ que todavía preside Alberto Fernández?
-Reitero: si no modernizamos el peronismo y no ponemos gente que tenga claro que tenemos que cambiar algunas metodologías, no vamos a prosperar. No importa quién sea, tiene que tener claro a dónde queremos ir. Tenemos que generar políticas que atraigan a la sociedad, especialmente a los jóvenes. Tenemos que ser claros si queremos un peronismo para resolver los problemas de la gente, sacar a la gente de la pobreza y que el país se desarrolle o queremos un peronismo que se ponga a discutir poder y, cuando llegamos al poder, nos peleamos en la interna y nos boicoteamos entre nosotros. Después no podemos lograr los objetivos y nos ponemos a pensar en las próximas elecciones para seguir teniendo el poder. O sea, poder por el poder. Ahí le erramos. Por eso tenemos al frente del Poder Ejecutivo a una persona que está planteando un país totalmente contrario a lo que nosotros pensamos.
-¿Teme que Milei la emprenda mucho más drásticamente contra el Congreso y los políticos si se queda sin el instrumento del DNU o la ley?
-Creo que tiene actitudes violentas. Por sus manifestaciones, seguramente lo hará. Algún día comprenderá que o modifica la Constitución y establece una monarquía o respeta la democracia, la república y los poderes. Me parece que son los caminos que tiene que tomar el presidente. No sé cuál va a tomar. Yo veo que está en una actitud violenta, innecesaria, sobre todo con este Senado.
