Se trata de un tatuaje que se les realiza a las mascotas esterilizadas, ya sean felinos o caninos, “lo cual permite evitar otra cirugía, en caso de que se escapen y/o vuelven a ser adoptados”, según indicaron.
La medida oficial fue implementada en el marco de una campaña de castración, que se realiza junto a comisiones vecinales, asociaciones proteccionistas y la comunidad de cada barrio.
“Para pedir la visita del castrador móvil, se debe enviar una nota dirigida a Veterinaria Municipal, ubicada en calle España 423, solicitada desde la comisión vecinal u organizaciones pertenecientes a las diferentes zonas, que deseen utilizar este dispositivo”, dieron a conocer.
Los tatuajes son practicados por el equipo del área de Veterinaria de la municipalidad.