"Mi pedido es que se haga una sala oncológica en el nuevo hospital Bicentenario, con médicos capacitados para atender a nuestros niños. Lamentablemente cada vez son más y más los casos de cáncer en nuestra ciudad y familias destrozadas por esta cruel enfermedad", enfaitzó.
Agregó: "Necesitamos estar cerca de nuestras familias; tener contención; es muy difícil pasar por todo este sufrimiento solos y necesitamos estar seguros que al volver tendremos un hospital con una sala especial para pacientes oncológicos, ya que ellos se descompensan en segundos y no llegarían con vida a un hospital donde haya oncología. Necesitamos volver a casa y poder trabajar, cuidar de nuestros hijos y poder tener nuestra hija en nuestra ciudad con el hospital capacitado para todos".
El estado de salud de Antonella continúa siendo delicado y actualmente sus padres cuidan de ellos, instalados en el Hospital Garrahan.
En tanto, fuentes cercanas al Hospital Centenario explicaron que a pesar de la buena intención del pedido es impracticable para una ciudad de 100 mil habitantes. Explicaron que los hospitales de excelencia y colmados de especialistas reciben el sostén del Tesoro Nacional y nuclean miles de pacientes del todo el país.
En Gualeguaychú, sólo se cuenta con un terapista infantil, dos con especialidades y ningún oncólogo infantil.
Esto está ligado directamente a la cantidad de casos y de habitantes. "Es un pedido ideal pero no es lógico y hay que ser realistas", concluyeron.