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Uno de los detenidos de la banda de Celis
Uno de los detenidos de la banda de Celis
Uno de los detenidos de la banda de Celis
Su nombre ganó repercusión pública a mediados de junio, cuando fue detenido junto a otras cuatro personas por su vinculación con la banda de narcotraficantes que encabezaban los hermanos Daniel y Miguel Celis, que había sido desarticulada diez días atrás, cuando policías federales irrumpieron en un campo en el momento en que descargaban unos trescientos kilos de marihuana de una avioneta a una camioneta, en un campo de Colonia Avellaneda.

Se trata de Hernán Rivero, quien en diciembre de 2015 fue designado director de la Unidad Municipal Nº 2 Oeste de la Municipalidad de Paraná, repasa el sitio Entre Ríos Ahora. Rivero ocupó un cargo en la Municipalidad de Paraná pero mientras tanto retuvo el puesto que tenía en la Orquesta Sinfónica de la Provincia, como personal de planta administrativa. En la Orquesta, Rivero tenía la función de Jefe de División.

Su detención lo llevó a ausentarse de su cargo en la Orquesta. Así, acumuló inasistencias entre el 1º de junio de 2016 y el 31 de enero de 2017. En total, 175 días de inasistencias.

Pero esa no fue la falta mayor. Cayó en la trampa por haber incurrido en incompatibilidad, un aspecto que nadie había advertido antes, ya que asumió como funcionario municipal el 18 de diciembre de 2015 mientras retuvo el cargo en la Provincia.

A través del decreto Nº 1.021, del 10 de mayo último, publicado el miércoles 29 de noviembre, el Ministerio de Cultura y Comunicación de Entre Ríos ordenó una instrucción sumaria a Hernán Jesús Rivero "por encontrarse su conducta presuntamente incurso en la falta administrativa pasible de aplicación de la sanción disciplinaria de cesantía".

La banda


La caída de la banda que lideraban los hermanos Celis se produjo el domingo 28 de mayo, cuando efectivos de la Policía Federal dieron el golpe en un campo en la localidad de Colonia Avellaneda, cuando varias personas descargaban un cargamento de 317 kilos de marihuana desde una avioneta modelo Cessna, con matrícula paraguaya, aunque oculta bajo un ploter que la identificaba como argentina.

La droga le pertenecía a Daniel Tavi Celis, un narcotraficante que manejaba el negocio de la marihuana en el barrio Antártida Argentina de Paraná, otras localidades entrerrianas y tenía extensiones en la provincia de Santa Fe.

Los hermanos Celis lideraban una organización que operaba en distintos barrios de Paraná (Antártida Argentina, Paraná XVI y San Agustín) y extendía sus redes a las localidades de San Benito, Viale, Hernandarias, Nogoyá, Seguí e incluso hasta Santa Fe, Santo Tomé y Alto Verde. El negocio consistía en la venta de marihuana al menudeo y en el aprovisionamiento a otras pequeñas bandas, según la reconstrucción que hizo el sitio Página Judicial.

Como suele ocurrir en este tipo de organizaciones, la estructura estaba constituida por grupos familiares, y por eso, junto con los hermanos Celis cayó el padre de ambos, Eduardo Ramón Celis; el hombre que los crió, Miguel Carmelo Leguizamón, su esposa, Miguela Valde; y María Fernanda Orundes Ayala y Yamila María José Corradini, parejas de Daniel y Miguel Celis, respectivamente, entre otras personas.

Los efectivos de la Policía Federal y el juez federal de Paraná Leandro Ríos llevaban varias semanas esperando el aterrizaje de la avioneta y ese episodio, el domingo 28 de mayo, marcó el punto final de una investigación que reveló un complejo entramado de vinculaciones y complicidades entre la estructura que encabezaban los hermanos Celis, con el poder político y con sectores de la Policía; y se sucedieron una serie de allanamientos y la detención, hasta el momento, de 22 personas.

Tavi Celis pretendió emular a Pablo Escobar. Ese fue su error. Construyó su poder desde el asistencialismo en el barrio Antártida Argentina, ocupando el vacío estatal; y con gran astucia –más una buena porción de suerte–, logró evitar a la justicia: enfrentó tres causas por delitos de narcotráfico y nunca fue condenado.

El año pasado quiso tomar el control del gremio de los trabajadores municipales, a pesar de que no es empleado municipal; y hasta que cayó en desgracia era común verlo por los pasillos del palacio comunal.

Rivero es un empleado de planta del Ministerio de Cultura y Comunicación de la provincia. Fue contratado en 2003 para desempeñarse en la Orquesta Sinfónica de Entre Ríos y en 2008 fue designado como jefe de la División Prensa, Publicidad e Informática de la Orquesta. En 2010 pasó a la Municipalidad de Paraná, hasta 2013; y reingresó en diciembre de 2015, como jefe de la Unidad Municipal 2.

Rivero se encuentra detenido desde que fue apresado.

En la tramitación de la causa, el intendente Sergio Varisco declaró en la Justicia Federal a finales de junio último.

Varisco estuvo durante casi dos horas ante el juez Ríos y fue sometido a un severo cuestionario sobre las relaciones que tenía con Tavi Celis y personas allegadas, los nombramientos que hizo durante su gestión y el control que hace el municipio respecto de los recursos estatales. También resaltó que el secretario de Seguridad de la Municipalidad, Ricardo Frank, le aseguró que Celis no tenía antecedentes penales y negó haberse interesado por las circunstancias en que se produjo la detención de Celis, el 9 de agosto de 2016, a raíz de un hecho que se presentó como un intento de asalto a mano armada en una estancia de Las Cuevas, departamento Diamante.

En la declaración, el intendente admitió que conoció a TaviCelis durante la campaña electoral de 2011, "por la actividad política", contó que Celis integraba el Movimiento Vecinalista del Oeste, "en la zona de San Agustín" y hasta reconoció haber concurrido "una vez, a una reunión" que se celebró en la casa de Celis, durante la campaña proselitista previo a las elecciones de 2015.
Fuente: Entre Ríos Ahora

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