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El juez de la causa que investiga la denuncia por estafa y vaciamiento de Sociedad Anónima Entre Ríos (SAER), la empresa editora de El Diario, rechazó el planteo de dos defensores que buscaron apartar de la causa como querellante a quien originó esa investigación en 2013, Dolores Etchevehere.
El planteo de la defensa de los hermanos Grenón
Los abogados Guillermo Vartorelli y Guillermo Sampayo, defensores de los hermanos Walter y Viviana Grenón, dueños de Red Mutual, entre otras firmas (que entre 2010 y 2012 tuvieron en sus manos la mayoría accionaria de SAER, período en el que se produjo el vaciamiento), pidieron “el inmediato cese en el carácter de querellante particular de la Sra. Dolores Etchevehere”, petición que fue rechazada por el juez de la causa, el titular del Juzgado de Transición N° 1, Carlos Hugo Ríos.

Vartorelli y Sampayo pusieron en duda el rol de Dolores Etchevehere y plantearon en qué medida la mujer pudo haber sido víctima de algún hecho ilícito en SAER cuando al momento en que los Grenón tomaron parte de la sociedad, en 2010, ya no era socia de SAER. Y que, además, tampoco tenía ese carácter al momento de presentar la denuncia, en 2013.

En su escrito, sostuvieron que Dolores Etchevehere “no tenía participación accionaria que la legitime como víctima y que en consecuencia carece de legitimación como querellante por SAER (El Diario) y contra sus defendidos”. Y que “sus defendidos no tuvieron vínculo ni relación alguna con la mencionada denunciante, Sra. Dolores Etchevehere, pues ella no era socia de SAER desde el año 2009, por lo que mal podía haber sido perjudicada por un accionar atribuible a sus defendidos”.
El fiscal había rechazado el apartamiento
El fiscal Álvaro Piérola pidió al juez el rechazo del planteo y destacó “el reconocimiento a la condición de parte que a lo largo de todos y cada uno de los actos procesales han hecho las Defensas respecto a la Querellante. Los propios actos de los imputados, en sus presentaciones escritas, son claras muestras de consentimiento a la intervención que en sucesivas piezas procesales ha tenido la Sra. Etchevehere”, afirmó.

“No causa hoy un gravamen irreparable a la Defensa (no fue invocado y menos aún probado) todo aquello que antes no lo causó, en este caso, la participación activa de Dolores Etchevehere, por lo que entiendo inviable la advertencia de nulidad manifestada en el promocional”, añadió luego.
La madre y sus hermanos también querían apartarla
Rubén Pagliotto, defensor de la madre de Dolores, Leonor Barbero Marcial, y de sus tres hermanos, Luis Miguel, Arturo Sebastián y Juan Diego Etchevehere, denunciados en la Justicia, también adhirió al pedido de apartamiento de la querellante. “En 2010, casi dos años antes de que el paquete representativo del 66,66% de SAER se vendiera al grupo Nea Capital Creativo, (Walter y Viviana Grenón), la pluridenunciante Dolores Etchevehere de Güiraldes absolutamente nada más tenía con esa empresa, puesto que vendió en el aludido año a su madre, doña Leonor María Magdalena Barbero Marcial Vda de Etchevehere, la totalidad de su tenencia accionaria -heredada de su extinto padre- tanto en la empresa editora del matutino El Diario (SAER) como las cuotas sociales de las que resultó heredera en la firma consignataria e inmobiliaria Etchevehere Rural S.R.L”, señaló.

Mencionó en su escrito que “ningún empleado o ex trabajador de SAER formuló denuncia penal, por ningún hecho y contra ninguno de los imputados” y sostuvo que “la única denuncia fue presentada por Dolores Etchevehere de Guiraldes varios años después de vendido la totalidad de sus acciones en SAER, careciendo de derecho e interés legítimo para ello, utilizando la herramienta penal para saciar su voracidad infinita e inagotable por dinero y molestar a su familia con variopintas denuncias, dentro y fuera de nuestra jurisdicción».

El abogado hiló la causa que tramita el juez Ríos, de vaciamiento y estafa en SAER, con otra, que también tiene a Dolores como denunciante, en el proceso sucesorio de su padre, Luis Félix Etchevehere, muerto en 2009, y cita un incidente que ocurrió uno de los últimos días de 2020 y que tuvo al juez civil Martín Firpo como protagonista.
El juez resolvió no apartar a Dolores
El abogado Patricio Cozzi, representante de la querella, planteó que Dolores Etchevehere “reviste la condición de heredera del Sr. Luis F. Etchevehere, quien era titular de las acciones de SAER SA. y que partiendo de esa premisa se refleja de manera clara y expresa el interés legítimo para justificar el rol de acusadora privada”.

El juez Lendro Ríos rechazó la pretensión de los defensores de los hermanos Grenón y recordó que los anteriores representantes legales en la causa Etchevehere, Julio Federik y Leopoldo Lambruschini, nunca observaron la participación de Dolores como querellante y que recién lo hizo el 20 de noviembre de 2020 el nuevo defensor, Rubén Pagliotto. Dijo que tampoco el resto de los defensores, a excepción del planteo “tardío” de Vartorelli y Sampayo, hizo alguna observación.

“Esta situación, verificable en la causa principal, otorga razón al Ministerio Público Fiscal, que habla de un reconocimiento permanente de la intervenciones y condición de la querellante, por parte de las Defensas que han tenido acceso a la causa, conforme surge de las constancias de préstamo de la misma obrante en el Libro de Préstamo del organismo, lo que hace inviable la advertencia de nulidad manifestada en el presentación”, indicó el magistrado.

Y consideró “que no corresponde excluir a la Sra. Dolores Etchevehere de su intervención formal como parte acusadora, sobre un hecho en donde se dirime el vaciamiento de una empresa de titularidad de su padre, a la postre de la “Sucesión de Luis F. Etchevehere”, maniobra mediante la cual también se integraron parte de tales bienes a otra sociedad (Construcciones del Paraná SA) de la que la querellante fue excluida (..), conforman de modo suficiente una plataforma de razonabilidad para sostener el estado de cosas existente a la fecha, a riesgo de que una decisión en contrario cause un verdadero gravamen de imposible ulterior reparación, máxime si se entiende que existen cuestiones de hecho y derecho aún pendientes de verificación en la presente causa, en el sucesorio y en el concurso preventivo de SAER en trámite en sede civil, y también en extraña jurisdicción (Bs. As) en donde se investiga el presunto delito de extorsión. Esto sin olvidar que la señora Dolores Etchevehere, previo a la firma del escrito de desistimiento, deja constancia en sede notarial respecto al estado de necesidad, desesperación y desamparo frente a la coacción sufrida para suscribir dicho acto, situación referida por el Dr. Cozzi en el presente incidente”.
La otra decisión de Ríos
El juez Ríos, además, concedió el recuso de apelación formulado tras el rechazo al pedido de sobreseimiento formulado por Walter y Viviana Grenón en la causa por estafa que inició Dolores Etchevehere contra su familia.

El magistrado rechazó el planteo de prescripción formulado por los empresarios Walter y Viviana Grenón. Esos hermanos y los Etchevehere están imputados en una causa por estafa que tramita el juez de Transición Carlos Hugo Ríos, y en la que se les endilga el vaciamiento de Sociedad Anónima Entre Ríos (SAER), empresa editora de El Diario, a través de una maniobra de triangulación de la que participó una empresa “fantasma”, Construcciones del Paraná.

La denuncia, formulada en 2013 por Dolores Etchevehere, apunta a su propia madre, Leonor María Magdalena Barbero Marcial, y a sus tres hermanos, Luis Miguel, Arturo Sebastián y Juan Diego Etchevehere. Pero salpica a los hermanos Grenón y a otros ejecutivos de SAER.

El pedido de prescripción fue presentado por los abogados Guillermo Vartorelli y Alberto Sampayo, defensores de los hermanos Grenón. Al planteo se opuso, en duros términos, el fiscal Álvaro Piérola y el querellante particular, Patricio Cozzi.
Fuente: Entre Ríos Ahora.

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