Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
Trabajaron para determinar las circunstancias de las muertes los investigadores de la División Homicidios y personal de la Dirección de Criminalística, más la pericia médica realizada por los forenses en la Morgue de Oro Verde.

Un hombre de 39 años y una mujer de 38 fueron encontrados en el interior de la vivienda que se alquilaba en calle Crisólogo Larralde, en la parte sur de Paraná. Tal como informó UNO, en la jornada del sábado se dio el alerta para que personal de Bomberos sofocara un incendio que se declaró en la vivienda de calle Larralde al 1.700, a corta distancia de Zanni.

En esa acción se encontró el cuerpo de una mujer y de un hombre fallecidos, y con signos de haber sufrido cortes en el cuerpo.
Autopsia
En la jornada de este lunes, los integrantes del cuerpo forense de los tribunales, le acercó a la fiscal Yedro las primeras conclusiones del trabajo en la Morgue. Allí se estableció que el hombre de 39 años, chapista, había sido ultimado en la espalda con cerca de 20 puñaladas con un arma blanca.

Además, se confirmó que la mujer tenía cortes importantes en las muñecas, también efectuadas por un cuchillo de cocina que fue encontrado muy cerquita de esta persona de 38 años.

Para los forenses, las lesiones en la espalda del hombre, fueron letales, más allá que se determinó presencia de monóxido de carbono a causa del incendio.

La experiencia de los forenses, les habría llevado a marcar que el deceso se produjo por las importantes lesiones sufridas.

Se confirmó que en el cuerpo no había lesiones defensivas. Fue asesinado, mientras dormía, boca abajo. Idéntica situación se habría verificado en el cuerpo de la mujer. El suicidio no se descarta.
Constantes peleas en una casa sin energía eléctrica
Un dato no menor que se confirmó en la investigación a cargo de la Policía, es que la vivienda donde ocurrió el suceso el fin de semana, no tenía suministro energético.

A los bomberos y luego a los investigadores les llamó la atención la cantidad de linternas y velas que había en el interior de la casa. De esa manera, se descarta un incidente vinculado a un cortocircuito, y se podría establecer que una vela habría generado el foco ígneo dentro de la propiedad.

Por otra parte, se robustece la hipótesis que en la vivienda no hubo una tercer persona.

Tanto la puerta, como las ventanas, no tenían señales de violencia.

Y para corroborar la idea que el hombre y la mujer tenían problemas de convivencia con la existencia de situaciones de violencia recíproca -según el aporte de vecinos y algunos familiares-, es que no se descartaría de plano que se esté frente a un homicidio en la persona del chapista y de un suicidio de la mujer.

Los pesquisas de la División Homicidios y de la Dirección de Investigaciones, siguieron con la rutina de encontrar testimonios, sin descartar nada, pero la línea de datos lleva a que no aparezca otro elemento que cambie esa primaria hipótesis robustecida con datos y pericias.

Además, para tratar de aclarar este aspecto, se revisarán en las próximas horas varias cámaras de seguridad de comercios y vivienda aledañas, como también del sistema de seguridad del 911 para ver si subyace algún otro elementos que cambie la línea investigativa.

De la recolección de pruebas, hasta el momento no surgió la información que en la Policía o en tribunales haya existido alguna denuncia por violencia de género.

En las idas y vueltas de la relación -aparentemente tóxica-, nacieron dos hijos, que en la actualidad quedaron a cargo de familiares maternos.

Yedro esperará otras pericias forenses para afirmar esta idea que se concentró en la investigación.
Fuente: UNO Entre Ríos

Enviá tu comentario