Ambas partes coincidieron en que la idea es “unir los esfuerzos de los que tienen responsabilidades públicas, más allá de las pertenencias sectoriales y partidarias, bajo un mismo objetivo común: auténtica integración del puerto y la comunidad”, declararon.
En el encuentro, definieron un plan de trabajo para transformar la terminal en una parte activa de la ciudad, que permita la convivencia de las actividades operativas con la incorporación de zonas culturales, de ocio, comercios y restauración.
Esto permitirá “continuar con las actividades de exportación de madera, avanzar con acciones que permitan que la producción local y regional salgan por nuestro puerto a través de contenedores, diversificando e incrementando la tarea”, enumeró Lauritto.