En el libro "Messi, El Patriota", que publicó el diario La Nación, el futbolista escribió algunas líneas en las cuales contó sus sensaciones en la previa de Brasil 2014 y repasó su historia con la camiseta argentina.
"Siempre voy a estar donde la selección me necesite, en el lugar que sea y por la competencia que sea. Más allá de los malos momentos, soy un agradecido de todo lo que la Selección me ha permitido vivir", agregó.
El jugador del Barcelona tuvo algunos momento de menos reconocimiento, sobre todo en sus comienzos con la camiseta del conjunto nacional. "Claro que me llegaban todos los comentarios: que no demostraba ganas de jugar, que no cantaba el Himno o que no sentía la camiseta. Me dolía llegar a mi país y que muchos me pegaran injustamente", contó.
"Alguna vez llegué a pensar si yo era el problema, si era la causa de los malos momentos que atravesaba el equipo. Pero la culpa sólo dura un momento, hasta que reaccionás y seguís para adelante", agregó.
Sobre el presente, Messi manifestó que ahora se siente reconocido por el público en general y "creo que ellos valoran mi manera de jugar. Intento seguir creciendo y sueño con darle títulos a la Selección. Lo que más quiero es que la Argentina gane", añadió.
"Siempre fui muy fanático de la selección. Veía los partidos por televisión porque nunca pude verlos en una cancha como hincha. El recuerdo más fuerte que tengo de un Mundial fue el de 2002, cuando quedamos afuera de Corea-Japón. Lo viví con dolor", sostuvo.
Para Messi Argentina es su país, su familia, su manera de expresarse. "Me preguntan por qué no se me pegó el acento español y es simple: no quiero que se me pegue ni perder ninguna identificación con mi país. Acá es el lugar adonde quiero volver", concluyó.
