Es la primera vez que una denuncia de este tipo llega a juicio en la provincia. Tras una fumigación de agrotóxicos que hizo una avioneta cerca de la Escuela Nº 44 "República Argentina", la docente Mariela Leiva y cinco alumnos fueron atendidos con vómitos, náuseas, dolores y erupciones el 4 de diciembre de 2014.
La lucha del gremio Agmer en el marco de la campaña "Paren de Fumigar las Escuelas", que derivó en una denuncia y posterior actuación de la Justicia, tuvo como resultado que tres personas -el productor, el presidente de la empresa de aviación y el piloto de la aeronave- fueran imputados y procesados por "lesiones culposas leves" y "contaminación ambiental".
"El resultado de este juicio puede sentar un precedente, tanto para muchas escuelas rurales que se encuentran en situaciones similares a lo largo y ancho del país, como para todos aquellos docentes que sufren de estos mismos abusos de la ley, para que se animen a denunciar y luchar por sus derechos", manifestaron desde el gremio docente.
"La salud de los trabajadores y los estudiantes está en peligro, como lo demuestran distintos estudios científicos de nuestro país y el mundo debido a estas prácticas inherentes al modelo productivo", destacaron. Y subrayaron: "Estas situaciones atentan contra el trabajo de los docentes y los derechos humanos de las comunidades educativas rurales".
Finalmente, desde Agmer citaron el artículo 41 de la Constitución Nacional: "Todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber de preservarlo. El daño ambiental generará prioritariamente la obligación de recomponer, según lo establezca la ley".