Oroño reclamó que “el agresor nunca fue detenido ni demorado, Cuando fue a la comisaría fue porque lo llevó la madre, porque pensaban que Bruno había muerto”. Y aclaró que “cuando cometió el hecho tenía 17 años, pero ahora es mayor de edad”. La causa está caratulada como “lesiones y no como “intento de homicidio”, como viene pidiendo la familia de Bruno.
Sigue internado
El adolescente continúa mejorando levemente en el Hospital Centenario. A los 36 días de estar internado, el adolescente despertó del coma. Tiene una traqueotomía, pero “los médicos evalúan la posibilidad de quitarle la asistencia respiratoria definitivamente para pasarlo a una sala común”, indicó su padre.El joven “mejora de a poquito y falta poco para que esté completamente fuera de peligro”, aunque ya se confirmó que por el golpe en su cabeza tendrá secuelas en su ojo izquierdo. “No sabemos qué secuelas le van a quedar”, concluyó Oroño.