Al almuerzo que servirá hoy Sanz en un restaurante de la zona de San Fernando, con el propósito de definir con la dirigencia nacional de la UCR la política de alianzas del partido que preside, fueron invitados cuatro dirigentes entrerrianos: el presidente de la UCR y diputado nacional Jorge DAgostino; el ex diputado nacional Atilio Benedetti, ambos de la corriente Illia, y por la Alternativa Radical Entrerriana, Rogel y el ex intendente de Paraná, Sergio Varisco.
Pero la delegación se reduciría a la mitad, porque DAgostino anticipó que no podría asistir por razones de índole personal y Rogel estaría faltando por diferencias políticas.
No sé si voy. Mi presencia o ausencia no va a resolver el conflicto. Yo ya he dado el debate, desde hace un año y medio. Lo vengo dando en el bloque, le he reclamado a (Julio) Cobos que sea más contundente; le he dicho a Pino Solanas y a los socialistas que tienen que tener una voz mucho más clara. En este sentido rescato a Margarita Stolbizer (GEN), dijo Rogel.
El legislador interpretó, además, que algunos sectores de Unen están esperando que la UCR estalle para recolectar heridos para una construcción de centro izquierda. Tengo la impresión de que también hay estas especulaciones menores que deben superarse.
Retroceso
Rogel señaló que desde su lanzamiento, el pasado 22 de abril, Unen fue perdiendo posiciones en la consideración pública por defectos de la dirigencia nacional que en vez de trabajar para ver que posibilidades tiene, en primer lugar la UCR y en segundo lugar lo de UNEN, lisa y llanamente ha dado por sentado que lo de Unen no iba a funcionar. Algunos emprolijaron un poco el discurso y dijeron que con Unen no alcanzaba, cuando todos entendemos que ese es un debate de segunda vuelta.
Todos estos debates han sido públicos, hubo mucha operación de prensa en la cual hay sectores del poder económico y periodísticos que tienen la estrategia clara: en TV aparecen Massa, Scioli y Macri, a los tres lo subieron al podio, para luego bajar alguno de los peronistas para que el señor Macri pueda competir en segunda vuelta con alguno de los candidatos peronistas. Para eso la UCR molesta, interpretó Rogel.
En este plano exceptúo la posición de la dirigencia provincial que busca un acuerdo con el senador de PRO, Alfredo de Angeli. Son cosas distintas. Acá tiene que ver con una situación particular de lo que vive el radicalismo en Entre Ríos y en las provincias en general, donde, al no haber conducción nacional, cada una va buscando sus posibilidades.
