El hecho tuvo lugar en un camino vecinal que une las localidades de Aldea Protestante y Puiggari. Aparentemente, se produjo a consecuencia del polvo de la broza, a la altura de una curva, de la cual el conductor del rodado no se habría percatado.
“Veníamos en caravana, cuando debido al polvo que se levantaba por el transitar de los autos se nos perdió la visión del camino y seguimos de largo”, confió uno de los integrantes de la comitiva, “gracias a Dios -agregó- no sucedió de tener que lamentar víctimas de gravedad: solo susto y golpes menores”.
Efectivamente, no se lamentaron víctimas, aunque sí se produjeron daños materiales en el vehículo.