La decisión del juez Podestá se tomó al dar seguimiento a la causa que se inició en Gualeguaychú a fines de abril y que derivó en allanamientos que se ordenaron en junio y julio, tras una investigación que se seguía por la venta de drogas al menudeo en la zona norte de la ciudad.
La decisión del juez alcanza a su vez un policía que prestó servicio en las División de Tóxicologia y de Investigaciones y que fue trasladado a la comisaría de la localidad de Carbó por incumplimiento de los deberes de funcionario público y encubrimiento agravado. Al resto de los imputados, se los acusó de comercialización de estupefacientes agravada por la intervención de más de tres personas (arts . 5 c y 11 c ley 23737).
La fiscal Martina Cedrés había solicitado al Juzgado de Garantías Nº 1 una orden de allanamiento y requisa domiciliaria en los barrios San Isidro, Quijano y La Cuchilla de Gualeguaychú la que fue dispuesta por el juez Podestá el 5 de julio, fecha en la que a través de un operativo se logró la detención de las personas, se secuestraron armas de fuego y municiones de distinto calibre, teléfonos celulares, computadoras, elementos de corte y armado, envoltorios para comercialización, además de marihuana y cogollos.