El fenómeno se debería a que están ingresando diariamente a la República Oriental del Uruguay numerosos transportes con cargas de mercaderías, tales como: cereales, laminillo de hierro, raciones para animales, caños desde Chile para empresas constructoras, sebo en camiones tanque para la industria del cuero, azúcar procedente de Tucumán para Azucarlito, entre otros rubros.
A medida que los camiones son liberados desde la Aduana argentina, se estacionan en la explanada del acceso al puente, con capacidad para unos quince vehículos pesados, por cuanto la infraestructura fue pensada para responder a la demanda turística y tránsito vecinal.
Versiones indican que, en este cruce internacional, son más ágiles los trámites para camiones y otros vehículos que en el puente General San Martín (Gualeguaychú- Fray Bentos), lo que posiblemente motiva a las empresas a elegir esta vía de ingreso al vecino país, lo cual sería una posible explicación de este escenario.