Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
No fue un procedimiento común el que llevó adelante la justicia en Concordia este jueves, en procura de hallar pruebas que permitan esclarecer la estafa perpetrada en la ATER con las compensaciones tributarias.

El blanco del operativo fue el Contador Julio Schmukler. Los allanamientos se ejecutaron en tres domicilios distintos y en cada uno de ellos participó un fiscal diferente.

El Dr. Germán César Darío Dri tuvo a su cargo el procedimiento en la actual ubicación del estudio contable Schmukler Speroni, ubicado en calle Asunción, entre Pellegrini e Hipólito Yrigoyen.

El Doctor Darío Guillermo Mautone desembarcó en la residencia familiar de Schumukler, mientras que la doctora Julia Elena Rivoira hizo lo propio en una casa que fuera la anterior ubicación del estudio contable.

Rivorira habría encontrado el anterior estudio, ahora en desuso, cerrado con candado y sin ninguna persona en su interior, por lo que debió forzarse la cerradura para acceder a las instalaciones, donde sólo se hallaron papeles archivados.

Tanto en su casa particular como en su actual estudio, Schmukler facilitó el acceso y el trabajo de los fiscales y peritos, sin oponer resistencia.

Se especula con que el prolongado lapso transcurrido desde que tomara estado público la estafa en la ATER permitió que las personas sospechadas de haber tenido participación se preparasen para recibir a la Justicia.

Esta suposición cobra aún mayor fuerza en el caso de Schmukler, el primero en ser señalado como presunto "gestor" de la mayoría de los créditos fiscales vendidos a empresas de Concordia y la zona, puesto que se trata de un profesional que ya pasó por la experiencia de estar bajo la lupa de la justicia en la estafa de Concordia CAR.

Enviá tu comentario