Los uniformados identificaron un vehículo Mercedes Benz, conducido por un ciudadano de nacionalidad oriental, el cual transportaba un caja térmica con pescado de mar, carne porcina, carne aviar, todo ello fuera de las condiciones adecuadas.
Se hizo saber que se detectó que la carga se encontraba en un mismo recipiente, fomentando la contaminación cruzada. También se observó que no reunía las condiciones organolépticas, teniendo en cuenta que iba directo a la comercialización para consumo humano, poniendo en riesgo la vida y a salud de los consumidores, con aquellas enfermedades que son de público conocimiento (triquinosis entre otras), estando estos productos en las mencionadas situaciones antihigiénicas y fuera de su temperatura adecuada.
Otro punto que se tomó en cuenta fue la falta de documentación que amparara su procedencia.
Por ello, los uniformados, siguiendo las pautas establecidas por el médico veterinario de la repartición, de forma inmediata procedieron a la desnaturalización, mediante la acción del fuego, de los productos en cuestión, realizándose las actuaciones correspondientes ante testigos civiles.
