Aparentemente, el móvil de la comisaría quinta realizaba un recorrido preventivo y advirtió que en ese lugar había desorden.
Cuando los efectivos descendieron del rodado e intentaron calmar la situación, el uniformado a cargo del patrullero fue agredido y se desvaneció.
Inmediatamente fue trasladado al Centro de Salud Ramón Carrillo y luego derivado a un sanatorio privado, donde se constató que tiene fractura y hundimiento de cráneo.