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La movida que significó el Censo 2022 dio para mucho más que estadísticas. En el departamento Colón, la del 18 de mayo fue una jornada tranquila. Pero no del todo.

Además de quienes no quisieron abrir la puerta de su casa y algunos enojos, entre los inconvenientes registrados hubo un accidente de tránsito, la incertidumbre de no ubicar a dos censistas cuando ya había caído la noche y otra que no fue bien recibida por un can.

La información fue brindada a El Entre Ríos por quien tuvo a su cargo la coordinación de la actividad, el Prof. Eduardo Paredes.

“Un censista y su jefe de fracción volcaron con el auto, en el ejido de Villa Elisa. Fueron hospitalizados y físicamente estaban bien, así que recibieron el alta”.

“En Colón una censista fue mordida por un perro en la puerta de una vivienda. La atendieron en el hospital, donde la medicaron. Había que conseguir una inyección y la tramitamos por el seguro, pero finalmente lo resolvió Salud Pública”.

El momento de mayor zozobra fue cuando perdieron todo contacto con dos jóvenes censistas. “Ya se había hecho de noche y durante más de una hora no pudimos ubicar a dos chicas de distintas fracciones, lo que nos preocupó porque además estaban en barrios alejados”.

“No sabíamos dónde estaban y recorrimos la zona sin verlas. En un momento nos planteamos hacer una exposición policial”.

Afortunadamente, el desenlace fue el esperado. “Aparecieron. Se habían quedado sin batería”, dice el director departamental de Escuelas.

Por otra parte, estaban quienes -pese a que claramente se encontraban en su domicilio- no accedían a permitir el trabajo de los censistas.

“Puntualmente nos pasó en una vivienda rural. Llamamos a la Policía a ver si era necesaria la fuerza pública, y nos informaron que en el censo anterior pasó lo mismo. Entonces lo anotamos como vivienda con moradores pero sin saber la cantidad, por lo que queda como deshabitada y se informa que no nos quisieron atender”.

Tampoco faltaron los indignados porque después de todo un día esperando al censista, este no había pasado por su casa.

“En las escuelas tuvimos algunos reclamos de gente enojada porque no los habían censado. Quizá el reclamo era justo pero la forma no era lógica”, señala el funcionario, y comenta que estas personas fueron censadas en el lugar.
Fuente: El Entre Ríos

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