El conocido abogado fue juzgado por 13 hechos de abuso sexual y promoción a la prostitución, por lo cual fue condenado a 23 años de prisión al unificarse las resoluciones judiciales en 8 delitos: una condena de primera instancia que quedó firme y otros 7 casos de abusos que no prescribieron, según la Cámara de Casación Penal de Concordia y el Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos.
En esa sentencia, se reafirmaron los fallos anteriores y, por primera vez, se consideraron los abusos de Rivas como “una grave violación a los derechos humanos de las víctimas, a las que redujo a objetos de mera satisfacción sexual”.
El juez subrogante Tobías Podestá -que reemplaza al titular del Juzgado de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad, Carlos Rossi, quien se excusó en la causa- escuchará las fundamentaciones de cada una de las partes sobre el sitio de detención.
En principio, Raúl Jurado que defiende a Rivas pedirá la prisión domiciliaria como viene sosteniendo desde que se conoció el veredicto del Superior Tribunal de Justicia.
Enfrente estará el Ministerio Público Fiscal, encabezado por el coordinador, Lisandro Beherán, que insistirá con su postura de meses atrás al unificarse las condenas. Entonces, había elevado un pedido de cárcel efectiva inmediata a través de un escrito presentado ante el juez de Ejecución y la Sala II de Casación Penal.
Rivas enfrenta a partir de este jueves dos posibilidades para su destino: cumplir los 23 años de cárcel en la Unidad Penal Nº 9 “El Potrero” o bien obtener definitivamente el beneficio de la prisión domiciliaria, de la cual goza hasta el momento.
