Jugando un puñado de minutos en el cierre del partido ante Sportivo Belgrano cerró su ciclo en DEPRO un histórico como Patricio Iván Valente. Se llevó el aplauso de todo el estadio y lógicamente se le escaparon algunas lágrimas de emoción porque se le vinieron a la mente cada una de las gestas de la última década.
El defensor uruguayense llegó al Azulgrana en 2013, en plena etapa de resurgimiento. Luego de dos descensos del viejo Argentino B, se estaba gestando una etapa gloriosa del club, de la Liga de Colón y del fútbol entrerriano. En apenas 2 años y medio DEPRO pasó de la Liga al Torneo Federal A tras ascender de manera implacable (ganó los 10 partidos) en el Torneo del Interior 2014 y obtener uno de los ascensos del Federal B 2015 al ganarle las dos finales a San Martín de Mendoza.
De ahí en adelante la historia es más conocida. Un DEPRO consolidado en la categoría, más allá del susto de esta temporada, y con históricas participaciones en Copa Argentina donde se dio el lujo de medirse con Talleres de Córdoba –cuando volvía al Nacional B en 2016-en el estadio Kempes y frente a River Plate en el estadio de Banfield a principios de 2021.
“Cuando terminó el partido se me vinieron a la cabeza un montón de cosas que viví en el club, esas que uno todavía no toma dimensión, que no imaginaba que podían suceder cuando llegué en 2013. Por eso quería irme con el equipo salvado, no me iba a perdonar irme al descenso”, arranca relatando el Pato en una entrevista con Deportes 12 (Radio 12 de El Entre Ríos).
El surgido en María Auxiliadora –jugó ahí hasta los 14 cuando se marchó a Gimnasia- fue concreto a la hora de referirse a su decisión: “En el último año no venía jugando y veía que no era del todo por lo futbolístico. Lo fui pensando con mi familia, que me ayudó a pensarlo sabiendo que DEPRO es mi casa, y decidí cerrar una etapa y buscar otro horizonte”.
El nuevo desafío arrancará enseguida porque el central será un refuerzo de lujo para Atlético Uruguay que este fin de semana debutará en el Torneo Regional Amateur. “Está casi cerrada mi incorporación, si el club me brinda lo que solicité me voy a instalar en la ciudad y la idea es jugar unos años más”. Para más adelante está la idea de ser DT: “Me viene entusiasmando De Ángelis para que haga el curso. Tengo que capacitarme mucho, no alcanza con haber jugado mucho tiempo”.
Su camino en DEPRO fue muy largo y para acelerar el repaso la propuesta fue subrayar los mejores momentos: “Nunca sentí una emoción tan grande como cuando ascendimos en Mendoza contra San Martín. Ese día me dije para esto juego al fútbol. Jugamos un torneo bárbaro, eliminando de visitante a La Emilia, Estudiantes de Río Cuarto y San Martín”, resalta. Y agrega: “Lógicamente también quedaron marcados el ascenso al Federal B y los partidos con Talleres y River, pero éstos resultaron más un premio porque fueron clasificaciones y no una campaña entera”.
Volviendo a la actualidad y con el lógico alivio de haber mantenido la categoría en una temporada muy dura para los entrerrianos (Juventud Unida descendió, Atlético Paraná está muy comprometido y Gimnasia llega a la última fecha fuera de la zona de Reducido) Valente se hizo tiempo para indicar que: “Se hicieron muchas cosas mal durante el año, creo que en cierta forma subestimamos la categoría y casi nos da un cachetazo”. Y señaló sin miramientos: “Cuando estuvimos en zona de descenso pasé varias noches sin dormir”.
De cara a lo que viene, y empezando a verlo como hincha, el ex jugador de Gimnasia, Juventud Unida, Chaco For Ever y Mandiyú resaltó: “Es muy importante para DEPRO y la Liga de Colón que el club entre en el octavo año en el Federal A. El club tiene que aferrarse a sus inferiores y reforzarse con jugadores que tengan el objetivo claro de tirar para adelante más allá de las dificultades, esa fue la convicción que mantuvimos siempre. Hay chicos del club que se hicieron grandes de golpe en el último tiempo y les dijimos que tienen que hacerse líderes”.
En el cierre una pregunta lo pone en aprietos: ¿qué dupla elegís: Valente- Perrón o Valente- Álvez? Son dos guerreros dentro de la cancha y excelentes tipos. Con Oscar aprendí mucho, me enseñó la forma de manejarme con los chicos y con los grandes. Es un tipo que ganó todo y nunca se la creyó. Fue una gran responsabilidad heredar su cinta de capitán. En ese momento llegó Milton que desde el primer día me ayudó mucho a llevar al grupo”.
