El personal de la División Robos y Hurtos, dependiente de la Dirección Investigaciones, tras arduas tareas de investigación en la red social, lograron observar que se publicaba a la venta un revólver, que sólo duró unos minutos. Dicha publicación fue borrada del perfil del supuesto vendedor.
Ante esta situación, los efectivos realizaron un análisis más profundo a fines de dar realmente con quien se encontraría detrás de ese perfil. Recordaron al respecto que la venta de un arma de fuego que esté rondando en las calles de esta ciudad causa una inmensa peligrosidad tanto para luego producirse abusos de armas o robos.
Momentos más tarde, se logró contactar con el sujeto, acordando una cita para la transacción en barrio Bajada Grande, a cambio de una remuneración económica a su favor. Pasadas las 11 de la mañana, se montó un operativo cerrojo a fines de dar con esta persona o quienes acompañaran al mismo.
Al arribar al lugar, se observó que desde el interior de un pasillo, que se conecta con calle Larramendi, se acercaron cuatro sujetos, quienes advirtieron la presencia policial y comenzaron a correr en distintas direcciones intentando darse a la fuga. Sin embargo, la Policía logró demorar a tres de ellos, todos de 18 años de edad.
En tanto, el cuarto de los jóvenes que los acompañaba, logró darse finalmente a la fuga por el callejón hasta perderse de vista. De todos modos, en la huida arrojó el arma hacia la cinta asfáltica. Se constató que se trataba de un revólver calibre 44 sin cartuchería. Tras esto, se puso en conocimiento a la Fiscalía en turno, que dispuso que los tres jóvenes fueran liberados sin más trámites luego de proceder a tomarle sus datos y el palpado de rigor.
