La extensa lista de reclamos que contuvo el documento que se leyó el domingo en la marcha anual del Ni Una Menos, en Gualeguaychú, volvió a dividir las aguas entre las protagonistas de la lucha contra la violencia de género y machista. Tras la última concentración, que este año tuvo lugar en la costanera, el sinfín de demandas extras incluidas dentro de la proclama volvió a hacer que la Asociación Civil Las Juanitas, una de las agrupaciones referente de esta causa en la ciudad, se autoexcluyera por segundo año consecutivo de la movilización.
“Lamentablemente, las dos últimas marchas han mezclado tanto las cosas que todo terminó siendo una manifestación polirrubro. Una vez más, nos mezclaron en una montaña de demandas que opacaron el justo reclamo original: el fin de los femicidios y la violencia de género. Y todo esto, ningunea a las mujeres”, protestó Claudia Fiorotto, presidenta de la organización, sobre los reclamos que Enredada Feminista, las organizadoras este año, incluyó en el documento que se leyó el 3 de junio pasado.
“Una vez más, volvieron a ningunearnos. Pero no a Las Juanitas, sino a todas las mujeres que pedimos por el fin de la violencia de género y el femicidio, reclamos que quedaron absolutamente opacados por toda esa ristra de pedidos que nada tiene que ver con el germen original de la marcha”, reprochó.
Aunque el documento arrancó con la exigencia del fin de la violencia machista, también incluyó reclamos tales como: la negociación por una nueva deuda externa con el Fondo Monetario Internacional, el despojo de tierras a comunidades indígenas y campesinas, la minería, el uso de agrotóxicos, se pidió que haya soberanía alimentaria, se repudió el veto del presidente Mauricio Macri a la Ley contra el tarifazo y los dichos de la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal referentes al cierre de universidades públicas.
“Me parece perfecto que se reclame contra el FMI si así lo creen, pero hagan otra marcha. Y esto no quiere decir que yo esté en desacuerdo, eso no está en discusión. Pidieron por tantas cosas que el motivo fehaciente y valedero por el cual se convocó el Ni Una Menos quedó enterrado debajo de todo eso que nada tienen que ver con la violencia de género y el femicidio”, lamentó la titular de Las Juanitas.
Uno de los reclamos más fuerte e importante de este año fue el pedido de aborto legal, seguro y gratuito, que la semana que viene se comenzará a tratar en el Congreso de la Nación. Sin embargo, y aunque en 2017 la diferencia entre ambas agrupaciones pasó por este punto, ahora la discordia no fue por tal motivo.
“El pedido del aborto legal, seguro y gratuito no fue el que desentonó porque es algo que está dentro de la Ley de protección a la mujer víctima de violencia. Está contemplado, y quizás es una discusión que deberíamos darnos entre nosotras. Creo que es un tema que hay que verlo, hay que tratarlo y también hay que educar al respecto. Estoy totalmente de acuerdo y no estuvo fuera de contexto en la marcha del domingo, pero… ¿qué tiene que ver el FMI?”, resaltó Fiorotto.
“Creo que esta mezcla de reclamos es lo que hizo que haya mermado tanto la convocatoria. En las primeras marchas -2015 y 2016- llenábamos la 25 de Mayo. La gente respondía a la convocatoria que hacíamos Las Juanitas. Pero pienso que la gente vio que en las de 2017 y la de este año se comenzaron a mezclar temas que nada tienen que ver con el Ni Una Menos, y la gente está cansada de todo ese tipo manoaseo y ese ninguneo”, aventuró.
Aun así, y a pesar de todas las diferencias internas, desde Las Juanitas descartan de raíz hacer el año que viene una marcha paralela: “Acá la cuestión no es dividir sino que dejemos las cuestiones ideológicas de lado y que todas juntas trabajemos en lo que realmente importa: que las mujeres dejen de morir. Las Juanitas sola no puede, las demás instituciones por su lado tampoco pueden. Hay que dejar de lado las posturas extremistas, la violencia con la que se hacen los reclamos y la política partidaria. Si dejamos de lado los individualismos y los egoísmos, podemos hacer cosas muy importantes, pero mientras prevalezca el querer tener razón a toda costa, todo seguirá igual”, remarcó dejando una puerta abierta para que ser recapacite desde ambos lados y todos puedan volver a luchar por el motivo que las une: el fin de la violencia de género y el femicidio.
