Allanamiento

¿Por qué la Justicia actuó rápido en el caso del convento?

Allanó el monasterio de Carmelitas, la misma mañana que salió a la calle la publicación periodística que denunció la práctica de torturas en ese lugar. Daniel Enz reveló cómo fue la investigación.

Daniel Enz es el autor del artículo "Las torturas del convento", que ocupa la tapa de una nueva edición de la revista "Análisis" que salió a circulación este jueves. "Es un investigación que me demandó cerca de dos años porque fue muy difícil hacerlas hablar a las ex carmelitas y familiares porque, en realidad, las secuelas físicas y psíquicas han sido muy fuertes", reveló el periodista al programa <i>"La 5ta. Pata"</i> (lunes a viernes de 9 a 12) de <b>Oíd Mortales Radio</b>.

Amplió lo dicho sobre el trabajo de recolección de testimonios: "me llevó mucho porque en cada entrevista que lograban con ellas no podían hablar. Se quebraban de tal forma que me pedían disculpas y, bueno, recién ahora están pudiendo hablar".

A las 7 de la mañana, aproximadamente, la Policía utilizó la fuerza para ingresar al monasterio.

Fue, precisamente esta misma mañana (alrededor de las 7), que la Policía encabezada por el fiscal Federico Uriburu allanó el convento de Carmelitas Descalzas de Nogoyá. No fue fácil ingresar: "la madre superiora resistió el allanamiento por lo que la Policía tuvo que romper la puerta para ingresar", detalló Enz para la radio de <b>El Entre Ríos</b> en Concordia.

<h5>Celeridad
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<b>¿Qué elementos tuvo la Justicia para actuar con celeridad?</b> El director del sitio "Análisis Digital" lo explicó. "Yo, anoche tarde, me comuniqué con el Procurador (Jorge Amilcar García) para comunicarle de este artículo y le envié un anticipo".

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Daniel Enz sobre el allanamiento al monasterio (audio de Oíd Mortales Radio).mp3

"Se actuó rápidamente y, lo importante, es que se comprobó y encontraron todos estos elementos. Había cilicios, flagelos. Es importante porque se comprobó todo lo que se denunció", opinó y añadió que "lo importante es que se entienda que aquí hay víctimas y que uno no está contra el convento, ni la Iglesia. Me parece que ser una religiosa puede determinar sacrificios, pero no este tipo de situaciones de tortura".

<h5>Las torturas sufridas
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El periodista nacido en Reconquista, Santa Fe, admitió que lo "sorprendió mucho cómo les exigían, a modo de castigo, el uso del cilicio que es algo que se coloca en las piernas, brazos o en el torso y tiene púas que deben ajustarse hasta incrustarse en la carne", detalló y añadió que "el flagelo es un látigo con muchas puntas que, a su vez, tiene pelotitas en cada hilo que tienen que pegar en la cola".

Minucioso trabajo periodístico realizó Daniel Enz para elaborar su informe.

Detalló, también, que en la investigación periodística "doy cuenta de cómo las obligaban a usar la mordaza que era algo que les hacían abrir la boca. Es como un tubo. Le hacen abrir la boca, le colocan eso y va atado con un elástico. Se lo hacían usar por 24 horas y solamente se lo podían sacar para comer".

Fuente: El Entre Ríos - Oíd Mortales Radio.