Legislatura entrerriana

La Cámara Baja vuelve a sesionar: Jefes de bloques en el recinto y diputados de modo virtual

A pesar de los múltiples pedidos de legisladores, no volverán las sesiones presenciales completas a Entre Ríos. Las autoridades legislativas han priorizado los consejos de la autoridad sanitaria y el regreso a la actividad legislativa plena se hará echando mano a las herramientas virtuales.

La Cámara de Diputados sesionará el jueves a las 11. Estarán presentes no más de diez personas en el recinto, contando autoridades de Cámara, jefes de bloque y personal legislativo. Los demás diputados participarán y votarán de manera remota.

“No tenemos ninguna prohibición para sesionar de manera virtual. No tenemos nada escrito. La sesión será virtual o no será. Todos preferiríamos que estén todos los diputados presentes, pero no vamos a tomar el riesgo de un contagio que termine cerrando toda la Cámara”, dijo el presidente del cuerpo, Ángel Giano.

El legislador puso el acento en que no se trata sólo de los diputados que se puedan reunir en un mismo espacio físico, sino de todo el riesgo que supone el desplazamiento, desde distintos puntos de la provincia, de “alrededor de un centenar” de personas, contando los diputados y sus colaboradores.

Entre Ríos se sumaría así al lote de las pocas provincias del país que han avanzado en esta modalidad de sesión. Giano puso el ejemplo del caso de Mendoza, donde se aprobó de manera virtual una norma tan importante como una ley de emergencia. El grueso de las legislaturas argentinas permanecen cerradas.

Inquietud de encierro
La forma en la que la Legislatura debe retomar sus sesiones generó en la última semana en Entre Ríos un debate político que atravesó incluso las filas del propio oficialismo. En ese sentido la UCR, en sintonía con la posición del partido en el orden nacional, pidió orgánicamente sesionar de manera presencial.

Uno de los argumentos de la UCR fue la validación de las sesiones virtuales, inquietud que puso sobre el tapete en el orden nacional la vicepresidenta Cristina Fernández cuando recurrió a la Corte Suprema para que le garantice legalidad a la nueva modalidad. Está detrás el temor a que la aprobación del llamado “impuesto a los ricos” sea declarado nulo por el modo en que se vote la ley.

En Entre Ríos no hay, por lo pronto, un proyecto por tratar que se pueda equiparar en importancia. Pero puede haberlo en cualquier momento.
Visibilidad
A esta cuestión técnica se suma una razón de orden puramente político que pesa en quienes piden volver a sesionar de manera presencial, guardando las normas del distanciamiento social: la necesidad de los legisladores de recuperar visibilidad, en un momento en el que toda la escena de lo público es acaparada, a diario, por el Poder Ejecutivo.

Y esta es una inquietud que comparten opositores y oficialistas. Los primeros se amparan en un argumento de corte republicano: la necesidad de control de los actos de gobierno que es, en definitiva, el principal rol que cumple la oposición en la Legislatura, un ámbito en el que son muy pocos los proyectos de ley que logran sanción por fuera de los que impulsa el oficialismo.

Lo que cabe preguntar aquí es si el modo remoto de sesión, con presencia sólo de los presidentes de bloque, no garantiza o limita ese control legislativo.

Más contundente, como argumento, es que los diputados y senadores opositores -pero también oficialistas- necesitan mostrar que trabajan y no están dándose una cuarentena acomodada en sus casas, con ingresos seguros y altos. Tienen claro que, para la visión del grueso de la sociedad, el trabajo de un legislador se limita a las sesiones; que la gente no entiende, no sabe, o no le interesa todo el resto de la tarea de un legislador.

En las últimas horas, la UCR fue blanco de críticas porque fue público y orgánico su pedido para sesionar de manera presencial. Acusaron a los radicales de irresponsables y de tener muy poco cuidado por la vida. Pero en los últimos días, las autoridades de la Legislatura recibieron pedidos de las propias filas del peronismo para sesionar de manera presencial. Algunos propusieron reunirse en un estadio de fútbol de la ciudad, al aire libre, con todo el espacio que ofrece el césped para mantener el distanciamiento.

También se formularon pedidos para que las reuniones de bloque del oficialismo sean presenciales, como un modo de dar espacio a un diálogo interno que, en apariencia, ha guardado en el último mes una cerrada cuarentena.

Fuente: Página Política