El domingo no terminó de completarse la fecha 6 del torneo clausura de Primera División de la Liga Concordiense de Fútbol. Aunque debía suceder, uno de los partidos fue suspendido por hechos de violencia que empañaron la tarde futbolera en la que también se jugó, sin disturbios, el clásico entre Santa María de Oro y Colegiales.
Cuando se disputaban 38 minutos del segundo tiempo del encuentro entre Victoria y La Bianca, que el local ganaba desde el primer tiempo con gol de Diego Savoredo, en una situación que se dio dentro del campo de juego y terminó con un expulsado intervinieron los hinchas del “Decano”, que apedrearon a jugadores de La Bianca y los hirieron, y llevaron a la suspensión del encuentro.
Según registró el periodista Sergio Ferrari, integrantes de la Policía de Entre Ríos, junto con el árbitro Javier Castro, decidieron que el partido no continuara por “falta de garantías”, mientras dirigentes de los clubes dialogaban entre ellos en búsqueda de una solución.
“Victoria hizo el gol, le expulsaron un jugador y de ahí el partido prácticamente no se jugó. Hacían tiempo, si la pelota se iba a los laterales se la dejaban a la hinchada y después ellos la tiraban al medio de la cancha y volvían a hacer tiempo porque había dos pelotas. Antes del problema una de esas pelotas quedó en el banco de La Bianca y un ayudante de Victoria vino a buscarla con insultos y empujones, el árbitro lo echó y ahí hizo problemas y empezó una pelea entre jugadores. La gente de Victoria tiró piedras y dos adoquines que golpearon a dos jugadores de La Bianca. No es bueno lo que pasó”, dijo un representante de La Bianca a El Entre Ríos sobre lo que ocurrió.
“No sabemos si van a jugar los minutos que faltan, a qué personas va a informar el árbitro o qué va a pasar, pero la violencia no se puede aceptar. Si hay sanciones no va a estar mal”, indicó luego.
En tanto, un agente de policía que estuvo presente en el lugar mencionó que “es cierto que las garantías no estaban dadas”. “Ya habían tirado piedras y cascotes desde la parcialidad local, pero también dentro de la cancha había un ánimo violento. En esa cancha es difícil sostener un partido entre clubes con parcialidades numerosas sin disturbios, más allá de los operativos policiales suceden estas cosas que son imprevisibles”, aseguró.
Fuente: El Entre Ríos - Sergio Ferrari