El cáncer de mama es el tipo de cáncer más frecuente en las mujeres. En Argentina se calcula que 1 de cada 8 mujeres que haya alcanzado la edad de los 80 años habrá desarrollado la enfermedad en algún momento de su vida. Se origina por el crecimiento rápido y desordenado de las células que revisten los conductos de la mama, y si no es tratado en una instancia temprana, puede avanzar a otras partes del cuerpo. Se distingue de otras enfermedades malignas por la agresión que el tratamiento implica a la imagen femenina y su efecto tanto físico como mental.
Prevención
Por eso la prevención y la información son herramientas de poder. Realizarse una mamografía a partir de los 40 años, o antes si existen antecedentes familiares, y asistir a controles médicos puede marcar la diferencia. Aunque la enfermedad no pueda tratarse, es posible actuar en una prevención secundaria, que consiste en un diagnostico precoz de la enfermedad para comenzar el tratamiento en sus etapas iniciales. Si bien el cáncer de mama puede afectar a cualquier mujer y ninguna queda exenta de esta posibilidad, se han identificado factores que pueden aumentar el riesgo de enfrentar la enfermedad.Hay factores modificables y no modificables, los que pueden evitarse y los que no. El factor principal no modificable es ser mujer y la edad, ya que la posibilidad de desarrollar cáncer de mama aumenta con los años. En el caso de los modificables, hablamos de cuestiones como el peso, el consumo de alcohol y tabaco y la utilización de terapias de reemplazo hormonal. Por ello, el mejor diagnostico es el que se hace a través de estudios de control en pacientes sin síntomas, ya que si el nódulo es detectado por la mujer en su autoexamen mamario quiere decir que ya tiene un tamaño más grande mayor a un 1cm, lo que permite que sea palpable.
Lo emocional también importa
El proceso que conlleva todo este tratamiento no es solo físco, implica aceptar cambios en el cuerpo y la rutina; la caída del pelo, las cicatrices e incluso la fatiga. Por eso acompañar a quienes transitan esta enfermedad no significa solo ofrecer tratamientos sino también un espacio de contención. No depende solo de decisiones individuales, hacer los controles, pedir turno, hablar del tema con alguien y hacerlo real son recordatorios de que la salud es prioridad. Cuidarse también es quererse.Durante todo octubre, se celebra en todo el mundo el Mes de Sensibilización del Cáncer de Mama como recordatorio del compromiso de toda la sociedad en la lucha contra esta enfermedad, y el apoyo prestado a la detención precoz, el acceso al tratamiento y los cuidados paliativos. No hay acto más amoroso que prestarle atención a tu propio cuerpo, escucharlo y atenderlo a tiempo.