Salud

Tóxico, sin olor y sumamente peligroso: el enemigo de todos los inviernos, en la palabra de una especialista

Tema recurrente de todos los inviernos. Sin embargo, se hace imposible dejar de abordarlo con la seriedad que requiere.

La intoxicación por monóxido de carbono (CO) se cobra más de 200 vidas al año. Una cifra que duele porque cada una de ellas era prevenible.

Entrevistamos a la Dra. Analía Corujo (Mat. N° 8664), médica especialista en Toxicología, responsable del Centro de Intoxicaciones del Ministerio de Salud provincial.

-¿Qué es el monóxido de carbono (CO)?

-Es un gas que se forma cuando hay insuficiente cantidad de oxígeno en el ambiente y se produce una combustión incompleta de materiales que tienen carbón en su composición.

Es sumamente tóxico, no tiene olor ni color, no se percibe en el ambiente y no avisa, por lo que es muy peligroso. Además, tiene más afinidad por nuestra hemoglobina que el oxígeno normal. Pequeñas concentraciones de CO alcanzan para intoxicar a una persona.

-Esta deficiencia de oxígeno, ¿por qué puede producirse?

-Puede ser por mucho consumo de oxígeno en el lugar donde uno está. Por ejemplo en un lugar cerrado en el que se prende el horno para calefaccionar, cosa que no se debe hacer; por un calefón colocado en el baño o en lugares sin rejilla de ventilación; los braseros son otra tremenda fuente generadora de CO. También pasa en ambientes cerrados muchos días por el frío y se va consumiendo el oxígeno.

Los garajes, fosas de talleres mecánicos, automotores con el escape picado y calderas de edificios con deficiencia en la ventilación, son otras fuentes de CO. Este gas es menos denso que el aire y sube, entonces por ahí la caldera está en el subsuelo y se intoxican en el primer piso.

Debemos verificar que la llama de estufas y hornallas sea color azul; cuando es anaranjado o de otro color, urgente hay que llamar a un gasista matriculado.

En cuanto a las estufas, tenemos que tratar de que sean las más seguras. Si son de tiro balanceado, hay que hacerlas revisar todos los años porque puede estar tapada la salida de los gases, por ejemplo por un nido de paloma u hollín, y los gases tóxicos van hacia adentro. Lo mismo con chimeneas y salamandras.

Durante el verano, una de las principales fuentes de CO son los grupos electrógenos. Por eso no hay que encender motores a combustión como grupos electrógenos o motosierras en espacios cerrados, sótanos o garajes.

Tampoco hay que mantener el motor del auto en funcionamiento cuando el garaje está cerrado ni dormir con los artefactos prendidos.

Si hay una mancha negra en el techo arriba del calefón o tiznados en la pared, hay que revisar el caño de evacuación, porque algo está pasando.

En Argentina, la mayoría de las intoxicaciones son por incendio; o en los hogares por deficiencia de ventilación, artefactos que funcionan mal o utilización de braseros.

-¿Cómo darnos cuenta cuándo la ventilación es suficiente? Porque hubo casos de intoxicaciones donde no estaban puertas y ventanas herméticamente cerradas, pero no alcanzó.

-Sí, hay que estar atento a síntomas como dolor de cabeza, náuseas o mareos, que son algunos de los síntomas de una ventilación deficiente.

Los que son centinelas y suelen avisarnos son las mascotas. Cuando están con desasosiego, piden salir o están con vómitos, es señal de alarma. Ellos son más sensibles, al igual que niños y adultos mayores. También lo son las embarazadas, en quienes una intoxicación por CO puede causar malformaciones al bebé.

Aunque los artefactos estén verificados, siempre hay que dejar entre 10 y 15 centímetros de ventilación. Y una vez por día, aunque haga frío, hay que ventilar toda la casa.

Además, recomendamos no dejar encendidas las brasas, ya sea en un brasero o un quincho cuando vamos a hacer algo a la parrilla. En el caso del brasero, incluso los que son a querosene, debemos prenderlos afuera del hogar y volver a sacarlos para apagarlos.

No utilizar el horno o las hornallas de la cocina para calefaccionar el ambiente. Un detalle que no tenemos en cuenta es que los disipadores de calor sobre la hornalla hacen que sea insuficiente la entrada de oxigeno al quemador de la cocina, provocando una combustión incompleta que genera CO.

El calefón hace años está prohibido en el baño, pero todavía se encuentran en casas antiguas. Es importante relocalizarlos. Tampoco puede estar en un espacio cerrado o mal ventilado, como un pasillo.

-¿Cuáles son los síntomas o signos compatibles con una intoxicación por CO?

-Si bien pueden confundirse con los de otras patologías (por ejemplo dolor de cabeza, náuseas o vómitos), el CO tiene la particularidad de que uno se va adormeciendo.

Muchas veces se confunde con un escape de gas, pero en ese caso es otro mecanismo el que produce la intoxicación, en el que se va desplazando el oxígeno de los pulmones; algo similar a cuando uno se está ahogando debajo del agua, entonces provoca excitación y uno se da cuenta que le está faltando el aire.

En cambio con el CO no, porque nos vamos adormeciendo y además se van intoxicando los músculos, con lo que provoca una claudicación de estos y la persona no alcanza a llegar a la puerta.

-¿Cómo se diagnostica la intoxicación por CO?

-Se pide un análisis de sangre para detectarlo, que es la carboxihemoglobina. En el Hospital San Martín lo hacemos.

-¿Son eficientes los aparatos para detectar los niveles de monóxido en el ambiente?

-Sí, son muy buenos. Hay otros que miden dióxido de carbono, que es un indicador de falta de oxígeno.

Además, los calefactores sin salida al exterior tienen dos mecanismos de seguridad: uno que corta la salida de gas cuando se apaga; y otro que mide el oxígeno y cuando baja a determinado nivel, corta, porque se asume que está generando CO.

-¿Cómo estamos en Entre Ríos respecto a las intoxicaciones por este gas?

-En los últimos dos meses he recibido entre 8 y 10 consultas de casos graves. Algunos por incendios y otros por mal uso de artefactos.

Unos jóvenes adultos estuvieron muy graves por utilizar un quemador a gas para calefaccionar durante toda la noche.

La intoxicación por CO es de denuncia obligatoria, con todos los datos del paciente, que van al Registro del Sistema Nacional de Vigilancia de Salud.

Centros de información, asesoramiento y asistencia toxicológica
Líneas telefónicas GRATUITAS con Atención 24 horas:

0800 – 333 – 0160 Hospital Posadas – El Palomar, Morón - PBA

0800 – 444 – TOXI (8694) Hospital de Niños R. Gutiérrez – CABA

0800 – 222 – 9911 Hospital Sor María Ludovica - La Plata – PBA

Fuente: El Entre Ríos