¿Qué hubiera sido de la historia Argentina si los hombres y mujeres de la Revolución de Mayo viviesen en tiempos como los actuales, marcados por la pandemia del coronavirus y el intensivo uso de las nuevas tecnologías? ¿Cómo hubiera sido esa organización en la víspera del 25 de Mayo? De qué manera se hubieran comunicado? ¿Qué rol tendrían las mujeres? ¿Cómo se cuidarían si el virus estuviese presente?

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El gimnasta Osvaldo Martínez Erazun, recientemente retirado de la alta competencia, se puso en la piel de un Manuel Belgrano del siglo XXI. Por su parte, la patinadora artística Micaela Ortíz interpretó a una de las mujeres más recordadas de aquel mayo de 1810: Mariquita Sánchez de Thompson.

En tanto, el basquetbolista Gonzalo Torres, exjugador del Club Estudiantes Concordia, se puso en la piel de Juan José Castelli. Diana Conti, de Stand Up Paddle (SUP) Concordia, tuvo el rol de Casilda Igarzabal, otra patriota argentina, esposa de Nicolás Rodríguez Peña. Por último, el rugbier Joaquín Berloni, referente del Club Los Espinillos, personificó a un Juan José Paso actual.

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