"Hasta hoy tenemos todo el equipamiento parado en la Aduana" (Juan Curuchet, medalla de oro en Beijing 2008 y presidente de la Comisión de Atletas del Comité Olímpico Argentino, en diálogo con Radio Mitre, viernes 4 de mayo de 2012).
El ganador junto a Walter Pérez de la máxima presea en la prueba madison en los Juegos Olímpicos de 2008, precisó que entre los elementos frenados "hay bicicletas, remos, GPS, cintas para que compitan discapacitados" y otros materiales que suman un valor de 7,9 millones de dólares.
Posiblemente está de más recordar para qué son imprescindibles los materiales pero, habida cuenta de que siguen retenidos en la Aduana de Argentina para ser usados por deportistas argentinos que van a representar a la República Argentina en Londres 2012, la explicación del campeón olímpico es necesaria: "sirven para poder entrenarse o mejorar y competir de igual a igual. Se han comprado materiales de última generación, que ayudan mucho más a la preparación de los deportistas".
El atleta reveló que le envió un mail directo al secretario de la Presidencia, Oscar Parrilli, para tratar el tema "pero no tuvo eco" y fue derivado a la Secretaría de Deportes. Simple, concreto y enormemente doloroso: una de las máximas glorias del olimpismo argentino hizo público su reclamo que no tiene respuestas de las autoridades nacionales, las mismas que defienden lo hecho en el "país con buena genta" e impulsan que, "para competir en suelo inglés, entrenamos en suelo argentino".
Hay más. No se quedó quieto el marplatense y también ponderó que el material está comprado por el Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo. Bien, felicitaciones. El Estado, a través de un organismo específicamente a fin al nivel de los atletas que ponen lo máximo para estar en los Juegos Olímpicos, invierte en ellos. Entonces, ¿por qué no liberan los materiales?
Más políticamente correcto fue lo explicado por Gerardo Werthein, presidente del Comité Olímpico Argentino. "He hablado personalmente con Guillermo Moreno me aseguró que esto se va a estar solucionando", aseguró al tiempo que advirtió que "no estamos hablando de todos los materiales, sino de algunos puntuales que están en vías de resolución", aclaró.
"Los deportistas tienen la mayoría de los materiales y tienen un apoyo inédito", afirmó Werthein. "Es verdad que hay algunas cosas pendientes de ingresar, pero no es menos cierto todo lo que se ha hecho y todo el equipamiento que ha ingresado al país", agregó tal como publicó Perfil.com el sábado 5 de mayo.
No nos subestime estimado Werhein. Primero: ¿todo pasa por Guillermo Moreno? Sólo el Secretario de Comercio Interior, tal monarca anglosajón, parece tener las llaves que abren o cierran los contenedores retenidos en el puerto de Buenos Aires. Si él lo autoriza se libera, sino "a llorar a la gruta", tal como se dice popularmente.
Me duele profundamente decirlo: por favor, no dejen que los usen queridos muchachos. Por un lado se exalta la figura del deportista argentino en un spot que, en igual dimensión, busca elevar el ego del ser argento al nivel de nacionalismo patriotero. Por el otro, se les está privando de tener el material necesario para transitar el último tramo de su preparación en lo que honestamente poco importa si se hace en suelo argentino, inglés o lunar.
Por favor, sugiero terminar con los dobles discursos. Hagamos causa común con Fernando Zylberberg y con tantos otros deportistas que (perdón por el tecnicismo) "se rompen el lomo" trabajando en una oficina, manejando un taxi o de lo que fuere a la par que entrenando, restándole horas de dedicación a su familia y amigos y golpeando puertas para juntar "el mango" que necesitan para viajar a una competencia. Todo durante cuatro años, o quizás más, para llegar a representar al país en los Juegos Olímpicos.
Si se decidió invertir más de 32 millones de pesos en equipamiento para deportistas de alto rendimiento, ¿cómo es posible que a poco más de 70 días el propio Estado inversor lo retenga en la Aduana? ¿No es tiempo de revisar la medida que bloque las importaciones cuando específicamente se trata de elementos (los medicamentos e instrumental de salud son otro ejemplo) que necesariamente hay que comprarlos afuera porque no se fabrican en el país? Tal como lo impone actualmente Guillermo Moreno, ¿no se está atentando contra una verdadera industria sin chimeneas que es el deporte?
En síntesis: "para el deportista lo que es del deportista, porque el deportista se lo ganó. Para el deportista lo que es del deportista. Para el deportista liberación", parafraseando a Piero en su siempre recordado "Para el pueblo lo que es del pueblo".
P.D./ A propósito del video filmado en Malvinas: "con razón este pobre muchacho (por Zylberberg) tiene que correr entre bancos, subiendo escaleras y esquivando postes de estacionamiento", ironizó en Facebook sobre la falta de materiales para competir un profesor de Educación Física "antipatriótico" (me contagié de su ironía) que tengo de amigo.
