Ya en el camping, entre escombros y taperas que recuerdan el paso de las últimas crecientes, apenas si son perceptibles vestigios de aquella "infraestructura vial, sanitaria, de iluminación, de alojamiento, recreación y seguridad" que la Corporación para el Desarrollo de Salto Grande (CODESAL) estaba obligada a construir, según el decreto 1198 del 28 de marzo de 2007.
Fue justamente aquel decreto, firmado por Jorge Busti y Sergio Urribarri, la herramienta jurídica de la que se valió Luis Mazurier, por entonces presidente de la CODESAL, para copar la Tortuga Alegre, el 4 de Mayo de 2007, en un operativo comando que incluyó a 15 efectivos policiales y de Prefectura.
9 años después, Mazurier sigue allí
Sin que parezca importar demasiado que ya no preside el organismo estatal, sigue allí. O al menos, están los mismos a quienes él asignó tareas en el lugar.
Por asombroso que parezca, aunque no son empleados de la CODESAL ni de ningún otro organismo o repartición estatal, cobran sus servicios con tickets que llevan impreso el CUIT del Ministerio de Gobierno de Entre Ríos.
Salvo el CUIT del ministerio que hoy conduce Mauro Urribarri, en esos pequeños papelitos con el isologo de la CODESAL todo parece trucho. La dirección de correo electrónico "not exist" y el número de celular 0345 156 258877 jamás contesta.
Qué dice el sucesor de Mazurier
En febrero de 2016, José Carlos Ostrovsky fue designado por el gobernador Gustavo Bordet como Presidente de la Corporación para el Desarrollo de Salto Grande. Tres meses y medio después, aún no hizo pie en la Tortuga Alegre.
"No sabía. Me acabo de enterar por vos que cobran con el CUIT del ministerio de gobierno". Tal su primera reacción cuando El Entre Ríos lo consultó por los tickets que entregan a los visitantes en el camping ubicado aguas abajo del complejo binacional argentino - uruguayo.
Sin embargo, Ostrovsky dejó entrever que hubo un acuerdo con Mazurier para no despedir a nadie mientras dure el proceso de transición hacia una nueva licitación.
El actual responsable de la Corporación para el Desarrollo del Lago de Salto Grande anunció que el gobierno entrerriano se apresta a llamar a licitación para la explotación de la Tortuga Alegre. "En los pliegos, exigiremos que el camping tenga habilitación municipal y la homologación de la provincia", se apuró a destacar.
El Entre Ríos: - ¿Acaso hoy no tiene ninguna de las dos cosas, siendo que depende de un organismo del Estado?, preguntó El Entre Ríos.
Ostrovsky: - No. No tiene ni una cosa ni la otra.
Estamos en deuda con el camino
El acceso a La Tortuga Alegre califica para las competencias de aventura.
En vez del camino pavimentado que el gobernador Sergio Urribarri prometió tener terminado para el año 2010 y ni siquiera comenzó a construir, el visitante afronta el desafío de atravesar profundos huellones, zanjas por las que corre el agua y tramos en los que sólo está habilitada una mano.
"Estamos en deuda con el camino. Empezamos los trabajos pero no los hemos podido terminar aún", admitió Mariano Bradanini, Director del EMCONTUR en el Área de Perilago y zona de La Tortuga.
De haberse cumplido el artículo 5 de aquel decreto 1198 del 28 de marzo de 2007 que posibilitó el desembarco de la CODESAL en la Tortuga Alegre, llegar hasta allí sería hoy tan simple como circular por cualquier ruta asfaltada.
Bahler contra Mazurier
Al justificar un reciente pedido para que sea disuelta la CODESAL, el Diputado Provincial Alejandro Bahler había denunciado el actual estado de cosas del camping preferido de los pescadores, escenario de la tradicional Fiesta Nacional de la Boga.
"En la Tortuga Alegre, la entrada sigue siendo cobrada por gente de Mazurier. El lugar está plagado de deficiencias y no se prestan servicios, pese a que se cobra el ingreso", disparó.
En su última arremetida contra el director del diario El Sol, el legislador del Frente Renovador propuso cerrar la CODESAL porque "fue un organismo que se creó a la medida de Mazurier", y sus funciones se superponen a las del EMCONTUR (Ente Mixto Concordiense De Turismo).
Bahler aprovechó para traer a colación que "el Hotel Ayuí sigue siendo explotado por una persona allegada a Mazurier sin tener ninguna concesión legal vigente", situación que es investigada por la Justicia desde noviembre de 2013.
