Atención

Esta imágen puede herir
su sensibilidad

Ver foto

Compartir imagen

Agrandar imagen
El director del Servicio Penitenciario, Marcelo Sánchez, confirmó el secuestro de un celular a Daniel "Tavi" Celis, acusado de liderar una banca narco; y el retiro de un teléfono común del pabellón en el que se encuentra alojada la funcionaria Griselda Bordeira, detenida por presuntos vínculos con la misma organización. Respecto del aparato que le fue incautado a Celis, el funcionario penitenciario confirmó que se trata de “un celular de telefonía móvil, un elemento prohibido” en el interior de las cárceles. El hecho se registró “el sábado, durante un procedimiento en los pabellones”.

Y en ese marco, indicó que “tener un elemento de este tipo es un quebrantamiento del régimen de seguridad y disciplinar” del Servicio Penitenciario.

Celis se encuentra detenido en la cárcel de la ciudad de Federal, mientras que Bordeira está en la Unidad Penal 6 de Mujeres.

Sobre el teléfono común que fuera retirado del pabellón en el que estaba alojada Bordeira, se explicó que es “un teléfono común que no tiene acceso a redes sociales”.

“Son los teléfonos comunes con los que cuentan todos los pabellones donde están alojados los internos”, indicó al respecto. “Son celulares que solo sirven para recibir llamadas, porque así están digitados desde la compañía telefónica”, aclaró al respecto.

Pero cuando se le consultó a Sánchez el motivo de la medida, aclaró que fue “porque había una orden judicial por la que se tenían que retirar los teléfonos del pabellón”.

Como consecuencia de esta medida, otras seis internas que comparten el pabellón con Bordeira quedaron incomunicadas. El funcionario desmintió que Bordeira haya tenido “elementos de comunicación personal”. “Son teléfonos comunes para toda la población de internos”, subrayó.
Servicio de comunicación
El titular del Servicio Penitenciario explicó que “dentro de los derechos con los que cuenta cualquier alojado, está el de comunicarse con el medio exterior, como lo determina la ley”.

“Desde el Servicio Penitenciario se tiene garantizado el servicio de comunicación a través de la telefonía de este tipo: son teléfonos de uso común que están dentro del pabellón”, continuó Sánchez.

“Antes se tenían los teléfonos públicos que existían en la calle, cada pabellón contaba con un teléfono de este tipo, y con el correr del tiempo y el avance de las nuevas tecnologías, desde las empresas de telefonía se entregaron equipos nuevos”, expuso Sánchez.

“Están ubicado en un sector común al que tienen accesibilidad a partir de la 7 a 22 que es cuando se producen los controles y cierres de pabellones”, indicó.
Fuente: El Once

Enviá tu comentario