“Llegué casi desmayada”, contó Fátima. Los médicos lograron reanimarla y comenzar a darle tratamiento para su recuperación, que será un “proceso lento”. “Está siendo difícil, por segunda vez no creería que pasaría por algo similar; tengo ganas de estar ya en casa”, sostuvo.
“Quiero llevar tranquilidad y agradecer las muestras de cariño”, manifestó Fátima. Y agregó: “De toda experiencia uno debe salir fortalecido”. A la vez, pidió “por las personas que esperan su soplo de vida” y felicitó al equipo médico y profesional de la Fundación Favaloro: “Me están tratando muy bien, ¡son increíbles!”.