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La fiscal auxiliar Dra. Eugenia Molina, que está al frente de la investigación por la muerte de Jesús Sánchez –acusado por el femicidio de Jésica Riquelme–, afirmó que “no habría dudas sobre la autodeterminación” del hombre. En este sentido, los médicos determinaron que el cuerpo no presentaba lesiones o golpes que hagan dudar sobre su ahorcamiento.

El hombre fue hallado sin vida este lunes en el baño de las celdas de la Jefatura Departamental de Federal, donde se encontraba detenido tras ser acusado de haber asesinado a Jésica Riquelme, embarazada de siete meses. De acuerdo a los testimonios recabados entre otros detenidos que estaban alojados en las mismas celdas que Sánchez, éste se habría levantado durante la madrugada del lunes para ir al baño y al demorarse, uno de sus compañeros fue hasta el lugar y lo encontró sin vida.

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La fiscal confirmó que el hombre tenía atado a su cuello un trapo similar a una gasa, que era utilizada por los detenidos para colgar ropa y su cuerpo pendía de uno de los barrotes de la ventana del baño.
El hecho
El hombre estaba detenido y sospechado del femicidio de Jésica Riquelme, su expareja. El sábado pasado, la mujer ingresó sin vida al hospital de Federal y, tras una cesárea, se dio a luz a una niña de 7 meses que aún lucha por su vida. La fiscal que investiga el caso confirmó que la víctima había recibido un golpe en la cabeza por lo que tenía fractura de cráneo, además de hundimiento del ojo izquierdo y la nariz quebrada. Desde el 12 de diciembre pasado Sánchez tenía restricción de acercamiento por 90 días a Riquelme, quien lo había denunciado por violencia de género.
Fuente: SIC-STJER

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