Al decir de los médicos y como otro dato alentador, la zona en donde se encuentra el proyectil se sigue desinflamando, lo que “libera” otras zonas del cerebro y evita eventuales inconvenientes en centros vitales del mismo.
Mientras tanto, el supuesto autor del hecho, de 52 años, cumple 90 días de prisión preventiva en la Unidad Penal Nº1 de Paraná.