La concentración se realizó en Plaza Constitución y desde allí, unas 60 personas, marcharon por 18 de Julio hacia calle Montevideo. Luego, tomaron al sur y se dirigieron a Jefatura de Policía.
Sin inconvenientes, los participantes fueron haciendo palmas y pidiendo por más seguridad. En alguna ocasión, se escuchó la voz de una señora que invitaba a quienes estaban en el centro a sumarse, mientras iban recogiendo firmas. En tanto, uno de los marchantes -que iba delante- comenzó a lanzar bombas de estruendo.
Una vez en la puerta de la jefatura, custodiada por tres integrantes de la Brigada de Tránsito, el encargado de Ayudantía, subcomisario Leonardo Haiache, explicó cómo sería la reunión, indicando que su comando los recibiría en el casino de oficiales, pero que no podían ingresar todos, sino hasta ocho representantes.
Entre aplausos de la gente, que pedía “traigan a la Republicana”, los delegados ingresaron y fueron recibidos por el jefe de Policía, comisario general Luis Mendoza; el subjefe, comisario mayor Orestes Leles da Silva; y el director de Coordinación Ejecutiva, comisario mayor William Pereira.
Ya en el casino, los delegados dieron lectura a la carta que le entregarían a Mendoza: “Hacemos llegar la siguiente solicitud pidiendo el retorno inmediato de la Guardia Republicana a Paysandú. Sabemos de la falta de recursos humanos y logísticos que sufre la Policía local, así como de pedidos al ministerio que le compete sobre dichos recursos. Comprendemos necesario los requerimientos de la Policía al ministerio, pero a su vez el cumplimiento tomaría un tiempo que muchos sanduceros no tienen. Por lo expresado, el retorno de la Guardia Republicana supliría a la Policía local de más recursos humanos y logísticos. Por eso creemos justo, necesario y urgente atender este pedido que afecta a la gran mayoría del departamento de Paysandú”.
Aparentemente, desde el comando de la Guardia Republicana se está estudiando la posibilidad de llegar en los próximos días a la ciudad uruguaya. En ese caso, no sería a cumplir con tareas en coordinación con la intendencia como ocurrió anteriormente, sino a colaborar con la Policía local.
