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Las comparaciones suelen ser tan odiosas como injustas. Lo concreto es que una de las provincias socias de Entre Ríos en la región centro, la poderosa Córdoba, pudo ayer cerrar el canje de su deuda en dólares, logro al que también aspira la gestión de Gustavo Bordet.

En efecto, el Ministerio de Economía de la Nación autorizó la emisión de los bonos reestructurados de la deuda de Córdoba bajo jurisdicción de ley extranjera y desde el Ministerio de Finanzas de la Provincia mediterránea se informó que, concretada ya esa emisión, se cumplieron todos los pasos legales de la reestructuración de los tres bonos por 1.685 millones de dólares.

El viernes último cerró el período de adhesión a la sexta propuesta de reestructuración que planteó la Provincia y tuvo un alto nivel de aceptación: más del 96 por ciento de los bonistas acordaron, lo que equivale a la totalidad, puesto que el acuerdo del 66 por ciento bastaba para dar por cerrada la negociación.

Lo único que restaba era la autorización de la Nación para la emisión de los nuevos bonos y ese aval llegó ayer, con la firma del secretario de Hacienda, Raúl Rigo.

La administración de Juan Schiaretti logró dos años de gracia en los vencimientos de capital, un nuevo perfil de amortizaciones entre 2023 y 2029 y una leve reducción de la tasa general de interés, que bajó del 7,22 al 6,08 por ciento.

El escenario para Entre Ríos se volvió muy cuesta arriba luego de que un grupo de bonistas decidiera judicializar su reclamo ante los tribunales de Nueva York, aunque se supone que las negociaciones continúan tras varias propuestas y contrapropuestas que, al menos por ahora, no consiguieron arrimar posiciones. Desde Septiembre, según lo admitió el ministro de economía Hugo Ballay, el estado entrerriano entró en un "default" parcial, al no haber abonado el cupón de deuda vencido en agosto.
Fuente: La Voz de Córdoba y El Entre Ríos

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