Luego de la primera semana de retorno a la presencialidad de las clases, desde el gremio que representa a los docentes de la provincia remarcaron la necesidad de mantener el trabajo remoto en un contexto de alta ocupación de camas de terapia intensiva y un “amesetamiento alto” en la cantidad de contagios diarios.
“Hemos tenido que lamentar la pérdida de compañeras y compañeros docentes a manos de esta pandemia”, resaltaron desde Agmer y sostuvieron que “la docencia entrerriana tiene muy claro que el mandato urgente en estos momentos es el cuidado y la protección de la salud y la vida de nosotros, nuestros estudiantes y nuestras familias”.
En esa línea, si bien destacaron el avance de la campaña de vacunación, advirtieron que se necesita un umbral de 20 días para generar inmunidad en aquellos que hayan recibido la vacuna contra el COVID-19 y alertaron que “las bajas temperaturas ponen en riesgo la salud de los integrantes de las comunidades educativas”.
“Sin embargo, y pesar de las presiones, las operaciones y las amenazas de la patronal y de sectores partidarios irresponsables que recurren al escrache y los aprietes mediáticos y en redes sociales, las y los docentes y los equipos directivos venimos sosteniendo con firmeza la decisión colectiva de garantizar la tarea escolar desde la no presencialidad”, finalizaron.
