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A cuatro días del fin del plazo para la presentación de listas de precandidatos ante las juntas electorales partidarias para las PASO legislativas 2021, el oficialismo entrerriano no ha mostrado todavía ninguna cara. Nadie responde a las consultas sobre precisiones o estimaciones y se sabe que tampoco hay muchos interesados en aparecer en la lista que, suponen, puede tener suerte dispar en los comicios. La oposición, con el ex ministro Rogelio Frigerio y el intendente de Chajarí Pedro Galimberti a la cabeza, hace meses empezó a recorrer la provincia.

El 24 de julio, con la presentación de listas de precandidatos ante las juntas electorales partidarias, dará formalmente inicio la campaña proselitista para elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas Y Obligatorias (P.A.S.O.).

Esta elección de medio término será un termómetro del ánimo social y electoral en medio de una situación nunca vivida en la historia reciente del país, con una pandemia que ya se cobró más de 100 mil vidas y una economía que se detuvo, después de que venía andando en tres cilindros.

El oficialismo todavía no mostró ningún rostro, aunque el armado de listas viene discutiéndose desde principios de año. Mientras normalmente hay filas de nombres para sumarse a las listas, en esta ocasión, nadie de quienes tienen algo para perder está tan apurados como para aparecer en esa nómina, que podría resultar perdedora.

En el Peronismo, unido pero no tanto, se ceden gentilmente el lugar para encabezar la lista, para que sea otro el cargue con el peso de la derrota, de ser tal.

La oposición la lleva bastante más aliviada: ya perdió en el 2019 y para estas elecciones el gobierno le hace campaña con el manejo de la pandemia y de la cuarentena antieconomía.

De los cinco asientos que se renuevan este año, tres están en manos de la actual oposición y que resultaron electos en las legislativas de 2017. Deben entregar sus bancas Atilio Benedetti, de la UCR; Jorge Lacoste también de la UCR y Alicia Fregonese del PRO.

En tanto que por el Peronismo ponen en juego sus escaños Mayda Cresto y Ana Carolina Gaillard.

Completan la nómina de los nueve diputados de Entre Ríos, Gustavo Hein, del PRO; Gabriela Lena, de la UCR; y Blanca Osuna y Marcelo Casaretto del Frente de Todos. Todos terminan sus mandatos en diciembre de 2023.
Nombres y caras
El miércoles 14, los partidos debieron presentar ante la Justicia Electoral las alianzas con que se presentarán.

Once agrupaciones políticas conformaron el Frente Electoral Juntos por Entre Ríos. Suscribieron a este frente: UCR, PRO, GEN, Movimiento Social Entrerriano, además adhieren a este acuerdo el ETER (Entre Todos Entre Ríos), Movimiento Integración y Desarrollo, UCeDe, RECREAR, Una Nueva Oportunidad (UNO), Coalición Cívica y Nuevo Espacio Ramirense.

El peronismo entrerriano y sus aliados a diferencia de las elecciones de 2019, rebautizarán el bloque con el nombre Frente de Todos Entre Ríos, dejando de lado el sello Frente Creer Entre Ríos. Las fuerzas que confluirán en el Frente son el Partido Justicialista presidido por Bordet; el Partido Movimiento por Todos, a cargo de Javier Schnitman; Partido Frente Grande, dirigido por Nelio Calza; el Partido de la Cultura, la Educación y el Trabajo, presidido por Antonio Alizegui; el Partido Frente Entrerriano Federal para el Trabajo, la Producción y la Justicia Social, a cargo de Claudio Ava Aispuru; Partido Compromiso Federal, cuyo interventor es Tomás Luján; Partido Unión Popular, de José Ricardo Carelli. y el Partido del Trabajo y el Pueblo, cuyo titular es Leandro Gillig; el Partido Comunista de los Entrerrianos, presidido por Alejandro Milocco y el Partido Solidario, que conduce Mirta Graciela Alzugaray.

Los únicos que están concretamente en campaña son Rogelio Frigerio y Pedro Galimberti. El ex ministro del Interior de Mauricio Macri, se presenta como precandidato a diputado nacional por Entre Ríos. Pese a haber nacido en Buenos Aires, Frigerio tiene domicilio en Villa Paranacito desde hace décadas y tiene decidido hacer su desarrollo electoral en Entre Ríos. Las legislativas 2021 serían una estación de paso para la gobernación en 2023. Lo secundará en la lista la diputada provincial Gracia Jaroslavsky.

Del resto de los nombres nada se ha dicho, aunque los actuales legisladores pueden intentar repetir y de esa forma Atilio Benedetti puede seguir siendo eterno candidato. En el Radicalismo hay dirigentes envalentonados con la posibilidad de capitalizar el mal humor en contra del gobierno y hacer pesar su representación territorial en la provincia. Del mismo modo, pretenden instalarlo como un test de cara a la próxima elección por la gobernación y poner en carrera sus candidatos, como Pedro Galimberti de Chajarí o Darío Schneider, de Crespo.

Del lado del Frente de Todos también se puede repetir, con lo cual algunos nombres actuales pueden aparecer en las próximas boletas. Pero el oficialismo necesita alguna locomotora electoral que traccione el presente cuesta arriba del gobierno. Sin llegar a las “candidaturas testimoniales” que tuvo el Peronismo en alguna elección complicada, se especula con nombres de alto perfil que aporten capital territorial.

Desde un sector albertista del gobierno nacional están tratando de convencer a Enrique Cresto para que ocupe algún lugar central en la lista, lo que le daría a la elección de medio término el condimento especial de enfrentar a dos seguros contendientes del próximo turno: la gobernación 2023.

En algunas oficinas del gobierno provincial y de la Municipalidad de Paraná, ven con muy buenos ojos que Cresto sea el “padre de la derrota” y salga debilitado, de manera de allanar el camino para discutirle la candidatura a gobernador.

Sí definió el oficialismo que a la lista la armará el gobernador Gustavo Bordet y el jefe de la campaña será el senador nacional Edgardo Kueider.

Se supo esta semana que Bordet piensa en Carolina Gaillard, cercana a la Casa Rosada, y en el camporista Tomás Ledesma para encabezar la lista.

En Entre Ríos se ponen en juego cinco bancas para la Cámara de Diputados; quien gane la elección se queda con tres. En 2017 el triunfo fue para Cambiemos por 15 puntos. En el oficialismo, por estos días, manejan encuestas y reconocen que la vienen corriendo de atrás, pero se consuelan con la idea de que, esta vez, la derrota no sea tan dura.

En las últimas semanas, rodó el nombre de Enrique Cresto para encabezar la lista. La posibilidad de que el titular del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enosha) se ponga al frente no haría otra cosa que adelantar un posible escenario: el 2023. Todo indica que la propuesta electoral de Juntos por el Cambio la encabezará Rogelio Frigerio, cuyo plan es la Gobernación en dos años. Cresto también pretende sentarse en el sillón de Urquiza. La candidatura del funcionario nacional, analizan en el oficialismo, puede ser una mala jugada ya que hay otros dirigentes que tienen las mismas pretensiones que Cresto. ¿Por qué jugarían a matar o morir para entronizar a alguien que en el 2023 corra con ventaja cuando se discuta la sucesión de Bordet?

Lo cierto es que la posibilidad de que Cresto juegue surgió de un sondeo que le hizo De Pedro en una reunión de gestión a raíz de los anuncios e inauguración de obras que viene haciendo el concordiense en el territorio. Pero este fin de semana, el propio Cresto le bajó un poco el tono a esa versión que en su entorno habían dejado correr. En una entrevista radial se comprometió a “acompañar a los candidatos” en la campaña.

Por las definiciones, en el oficialismo nadie atiende el teléfono.
Fuente: Redes de Noticias

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