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El exlegislador, exconvencional constituyente y exfuncionario de Defensa, referente de la Unión Cívica Radical, Fabián Rogel, brindó declaraciones sobre la realidad política del país tras la asunción de Sergio Massa como ministro de Economía del gobierno de Alberto Fernández. En diálogo con el programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Rogel describió que “hay una especie de baile de la dirigencia política argentina, en el cual no importa demasiado el país sino en qué momento le va a tocar a uno entrar en este baile”. “Las causas nacionales profundas de la historia de este país tienen que ver con la actitud de arrojo, de decisión, pero acá pareciera que no importa lo que le pasa a la gente abajo, al pueblo, no importan los problemas importantes que se van acumulando, no importa la terrible inflación que soportamos ni las posibilidades de crecimiento que se están desperdiciando sino que importa en qué momento me toca actuar. Y la llegada de Massa tiene que ver con eso”, explicitó.

Agregó que “ha habido señales del gran país del norte para que Massa se incorpore –por más que él lo niegue- con unos superpoderes, como tuvo Domingo Cavallo en este país que tenía una especie de intervención en todas las áreas, y esto me hace acordar a esas épocas. Lo que más me preocupa es la presencia de un hombre como Daniel Marx en el gabinete económico”.

En relación con la postura de la oposición, Rogel sostuvo: “No parece mal que haya una oposición que no esté esperando que los que están gobernando se vayan escupiendo sangre, eso ha sido una virtud negativa del peronismo que si no gobiernan ellos, prefiere que los que gobiernan se vayan lo más rápido posible. A eso hay que sepultarlo, Massa es un hombre de diálogo que viene con un ímpetu para que si esto le va bien, posicionarse como candidato”.

“Si le va bien al país y él tiene posibilidades de ponerse en la grilla de los presidenciables, no me parece mal. Lo que me parece mal es que el oficialismo siga en esta interna que aparentemente la han cerrado entre Presidente y vicepresidenta, y que la oposición haya aprendido a tener un poco de cautela. Ojalá sea el sano miedo y que nos vaya bien, deseo que le vaya bien al país, no se puede hacer política deseando permanentemente que les vaya mal a los que están en el poder. Me parece una actitud muy mediocre. Por eso ojalá el gobierno acierte en esto para que podamos disputar en serio la buena política que consiste en ganarse el favor del pueblo con propuestas superadoras y mejores”, reflexionó.

Consultado por los primeros resultados que debería conseguir Massa, afirmó que “debe manejar el proceso inflacionario”. “Hay un patrón electoral que manda ese proceso inflacionario que esta dado en los supermercados. Cuando los precios suben por la escalera y por el ascensor baja el salario de los trabajadores, se terminan los cuentitos. Hay que frenar el proceso inflacionario que tiene que ver con una emisión sin respaldo y con un excesivo gasto público, y con un proceso productivo que está congelado en Argentina”, señaló.

“Massa habló de crecimiento con contención, el famoso derrame, hay un índice de pobreza muy grande, que son argentinos que la están pasando mal y que hay que tenerlos muy en cuenta en cada una de las medidas que se vayan tomando para que el país vuelva a retomar el camino de crecimiento”, advirtió el dirigente.

En cuanto al sector de La Cámpora que hoy ocupa lugares claves del gobierno nacional, aseveró que “Cristina no tiene muchas posibilidades de seguir esperando que un príncipe azul la invite a un baile en el cual ella ya ha sido muy protagonista; ella debe apostar a que el baile sea bueno, que la orquesta que tiene Massa al servicio del país funcione, y que nos vaya bien, porque seguir esperando en la táctica permanente de recordar lo buenos que eran ella y su esposo, no va más”.

“Hay un proceso judicial que ella debe resolver, que está en marcha, y no puede estar exigiendo la solución de sus problemas judiciales pendientes. A Fernández lo eligió ella, el peronismo gobierna las cosas en la República Argentina, ella fue esencial en eso porque tenía el 70 u 80% de los votos y el resto que lo aportó Fernández, sino las causas se hubieran acelerado y no sé si no hubiera ido presa”, analizó.

Como conclusión, planteó: “los jóvenes de La Cámpora están conchabados en lugares expectantes en el Estado lo reconocen a Máximo Kirchner con un liderazgo político, pero que lo ponga al servicio del país, porque no gobierna ni el radicalismo ni el PRO. Hacen el juego de una interna de la interna desde el Estado. La gente está mal, el pueblo está en una situación de sinsabor que necesita que le vaya bien, y en todo caso para que podamos disputar el año que viene la continuidad o el cambio del gobierno con mejores propuestas, no desde el desastre. Desde el desastre se deteriora la política y de eso no se dan cuenta algunas personas, ni siquiera la señora Cristina. El malhumor de la gente se traslada al peronismo, a los que gobiernan y a la política en general”.
Fuente: Radio de la Plaza - Análisis

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