A su vez se sumó al pedido de varios dirigentes de la categoría: “Se nota claramente la necesidad de una reestructuración”.
Sólo el objetivo mínimo
Para esta temporada nos trazamos tres objetivos: el mínimo de mantener la categoría, y después avanzar a los Play Off y el más importante, superar la buena campaña del anterior (eliminado en cuartos de final de Conferencia Sur por el campeón Zárate Basket).Nos pusimos la vara alta y no cumplimos las expectativas. Si bien logramos el objetivo básico de mantener la categoría, con los otros dos no pudimos. El equipo estuvo alejado a las pretensiones que teníamos, por lo cual fue una temporada de regular a mala.
Los altibajos, el principal motivo
Tuvimos muchos altibajos. En algunos momentos jugamos bastante bien, como a comienzos de 2024 cuando renovamos las expectativas, mantuvimos una fuerte localía y ganamos un par de partidos difíciles afuera como en Viedma. Nos ilusionamos en esa explosión que tuvo el equipo durante unas tres semanas.Pero llegaron las dos giras a Buenos Aires donde perdimos los 6 partidos y bajamos muchísimo en la tabla. Más allá de eso llegamos al último partido en casa con Unión con la posibilidad de terminar 11º y tener dos chances de Play In en casa para entrar al Play Off. Perdimos ese partido, quedamos 14º y después nos eliminó Pilar en el primer cruce.
El factor económico, cada vez más preponderante
La temporada comienza en septiembre y desde ese momento hasta ahora, porque los contratos de los jugadores duran 10 meses y todavía se están cumpliendo esas obligaciones, la economía se fue poniendo cada vez más compleja.Los gastos de traslado, alojamiento y comidas se llevan una gran parte del presupuesto, son el 60 o 70%. El dinero que gastás en esas tres cuestiones no lo podés utilizar para invertir en un plantel más competitivo.
Necesidad de reestructuración
Se nota claramente la necesidad de una reestructuración del cronograma de partidos y de la regionalización de las zonas. Los viajes deben ser menos y más cortos para evitar el alojamiento y sumar comidas. Se hace muy costoso.Hay que encarar esto con mayor eficiencia. Menos viajes, hoteles y comidas afuera, que es lo que hace mella en el presupuesto. Si esto no cambia va a ser difícil poder seguir en estas condiciones. Escuché al nuevo presidente de Echagüe, también al de Ameghino, opinan como la mayoría en pedir una reestructuración.
El mal presente del básquet entrerriano
Lamentablemente no es un buen presente. Ya van algunos años sin equipos en Liga Nacional tras la baja de Estudiantes, y en los últimos años se perdieron varias plazas de Liga Argentina.En los últimos años el aporte de la provincia no fue de la mano de la inflación. Hace una década estaba en el orden del 50% de nuestro presupuesto y hoy está entre el 10 o el 15%. Todo esto genera mayor dificultad para armar planteles competitivos y por ende recuperar el protagonismo deportivo.
La próxima temporada
Seguramente a mediados de junio empecemos a delinear la próxima temporada. Nuestra idea es que Martín Guastavino continúe al frente del equipo. Nos tenemos que juntar. Seguramente buscaremos ajustar algunas clavijas para armar el próximo plantel porque no nos fue bien.En principio el único jugador con contrato es Lucio Longoni y esperemos que quiera seguir con nosotros.
Esperemos poder armar algo más acorde a las expectativas que teníamos este año y no pudimos cumplir.
