Desde el organismo nacional recordaron que “tienen una premisa: droga que se secuestra, droga que se destruye”. En esa línea, Gendarmería nacional quemó más de nueve toneladas de marihuana, cocaína, ketamina y otros estupefacientes. El acto tuvo lugar en el crematorio del Cementerio Municipal de la capital santafesina. Contó con la presencia del Secretario Penal del Juzgado Federal de Santa Fe N° 2, de la Secretaria Penal del Juzgado Federal de Paraná y de autoridades del Gobierno local y de las fuerzas policiales.
Allí, el personal de la fuerza comandada por Gerardo Otero incineró más de 4 mil kilogramos de marihuana, 135 kilogramos de cocaína, 299 frascos de ketamina, más de 5 mil kilogramos de hojas de coca y plantas, plantines y tallos de marihuana. Las incautaciones se encontraban en poder de autoridades judiciales de las ciudades santafesinas de Rafaela y Santa Fe capital y de las localidades entrerrianas de Concepción del Uruguay y Paraná.