Al respecto, el jefe del programa Zoonosis y Vectores del Ministerio de Salud de Entre Ríos, Jerónimo Garcilazo Amatti, informó que se registran “muy pocas denuncias al año” de hallazgos de murciélagos que presentan los síntomas y aseguró que hacía tiempo que no se confirmaba un caso positivo en el ámbito local.
Qué hacer al encontrar un murciélago
“Si los vecinos encuentran un murciélago, no tienen que tocarlo”, manifestó Garcilazo Amatti. “Deben ponerle un balde encima y recogerlo con un papel o un cartón, colocarlo en doble bolsa y enviarlo al laboratorio situado en Santa Fe 235 para hacerle el análisis que confirma o descarta el virus de la rabia”, explicó.Aclaró, además, que los murciélagos que habitualmente se encuentran caídos en los jardines o en las casas son los que podrían tener la enfermedad. “Se trata de un animal que dentro de su colonia puede ser un reservorio del virus de la rabia y, cuando un ejemplar se enferma, pierde algunas habilidades, como la geolocalización. En estos casos se da que en vez de alimentarse y volar por la noche, se encuentran durante el día, tienen un vuelo torpe, se chocan cosas… es ahí cuando pueden ingresar a nuestras habitaciones o casas a través de ventanas que estén abiertas, golpearse y quedar dentro del domicilio o el jardín”.
Por otro lado, respecto al peligro que significa para los animales domésticos o las personas, indicó: “Entre mordeduras, saliva y heridas se pasa el virus de la rabia; el perro o el gato pueden adquirirlo, al igual que una persona que vaya a agarrar el murciélago. Si el animal lo muerde o entra en contacto con alguna herida, entonces el virus también pasaría”.
Recordó, además, que se trata de una enfermedad que puede ser mortal. La rabia “es una enfermedad zoonótica trasmitida desde los animales a las personas. Si bien con el perro o el gato la vacunación es preventiva y se tiene que hacer una vez al año, la vacunación humana solo es para casos especiales, generalmente cuando una persona es mordida por un animal que no puede ser observado por la inspección veterinaria, porque se trata de un animal salvaje o sin dueño, y es el personal médico tratante el encargado de recetar o no el tratamiento, siguiendo un protocolo”, explicó.
No hay que alarmarse
Garcilazo Amatti instó a no alarmarse por la presencia de comunidades de murciélagos, sino estar atentos a las medidas de prevención indicadas. Y recordó: “La principal medida de prevención es vacunar a nuestras mascotas”.Remarcó, además, que “no vamos a encontrar un animal sano que se choca contra una pared y cae en el piso. Además, el murciélago no se alimenta de sangre, sino que son insectívoros”. Y agregó que estos animales “cumplen un rol fundamental en el ambiente, que es comer mosquitos, que son los que transmiten otras enfermedades”.
En este sentido, la médica veterinaria y asesora en manejo integrado de plagas urbanas y vectoriales, Silvina Saavedra, sostuvo que “en caso de detectar un murciélago con rabia, no se debe matar a la colonia, ya que estos animales son muy beneficiosos para el ecosistema. Pueden aplicarse protocolos de expulsión, pero de ninguna manera se controlan eliminándolos”.
Indicó, además, que si un perro o gato tuvo contacto con un murciélago que está en el suelo, debe enviarse el ejemplar a diagnóstico y consultar con el veterinario las medidas a tomar.
No se debe fumigar
La veterinaria recordó que “la rabia es una enfermedad viral, mortal, prevenible, que se transmite con mayor frecuencia a través de la mordedura de un animal rabioso”. “Infecta al sistema nervioso central y finalmente enferma al cerebro y ocasiona la muerte”, señaló.Si bien todas las especies de mamíferos son susceptibles a la infección por el virus de la rabia, solo algunas son importantes reservorios de la enfermedad. “Varias especies de murciélagos insectívoros son también reservorio de cepas del virus de la rabia”, dijo al respecto.
No obstante, aclaró que no son una plaga y no se los debe fumigar. En este sentido, especialistas aclaran que los envenenamientos y el uso de sustancias para espantarlos son métodos que han mostrado ser ineficaces con amplias experiencias negativas en diversos lugares del mundo, por lo que instan a no utilizarlos.
