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Según la última medición realizada por la delegación local de la Prefectura en el puerto de la capital entrerriana, la altura del río Paraná este lunes alcanzó los 19 centímetros. La marca está 10 centímetros por debajo de la registrada este sábado.

En este contexto, y tras gestiones diplomáticas de los gobiernos de Argentina, Paraguay y Brasil; el Consejo de Administración de la hidroeléctrica Itaipú –ubicada entre Brasil y Paraguay– resolvió abrir las compuertas desde este lunes 18 y durante 12 días. La decisión se tomó con el objetivo de mejorar el nivel del río Paraná y dar así mayor seguridad a la navegabilidad de los barcos y buques dedicados al comercio.

La autorización para abrir compuertas fue tomada en reunión extraordinaria realizada el miércoles pasado; donde las autoridades consideraron dos situaciones: los contratiempos que venía registrando el tránsito fluvial en el río Paraná y el contexto de crisis económica por la pandemia causada por el Covid-19.

En un comunicado, el Consejo de Administración dijo que ha “reconocido el principio fundamental del derecho internacional de la utilización equitativa y racional de los ríos internacionales, en este caso el Paraná”.

Las autoridades de Itaipú dejaron trascender a los medios de prensa brasileños que no habrá pérdidas en la producción de energía con la apertura de compuertas ya que la demanda solicitada a la hidroeléctrica sigue siendo baja debido a la desaceleración económica por la pandemia.
Período de sequías
Por otro lado, en su último reporte el Servicio Meteorológico Nacional resaltó que el nordeste argentino (NEA) es testigo de un período de sequías que ya lleva nueve meses.

Desde agosto de 2019, las provincias de Formosa, Chaco, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes y Misiones vienen experimentando anomalías negativas mensuales de precipitación. Es decir, en cada uno de estos puntos del país llovió por debajo de lo esperado, de acuerdo a la media del período 1981-2010.

Sin embargo, desde comienzos de 2020, esta tendencia se acentuó y en algunas regiones la sequía llega a ser extrema.

En enero, solo el sur de la mesopotamia presentaba menores precipitaciones de lo normal, pero con el correr del tiempo, la región impactada se fue extendiendo hasta otras provincias como Salta o Santiago del Estero. Las precipitaciones deficitarias afectan a toda la cuenca del Plata, que incluye a Brasil, Paraguay y Uruguay.
Las consecuencias
Para el organismo, las consecuencias de un período tan largo con lluvias menores a las normales ya son visibles. Pero, quizás, una de las postales más significativas de esta situación que atraviesa actualmente el nordeste argentino sea la bajante extraordinaria de los ríos de la región. Consideran que “las anomalías negativas de precipitación en el sur brasileño tienen un efecto directo en el gran déficit de los caudales de algunos de los ríos más importantes de nuestro país, como el Paraná, el Paraguay, el Iguazú y el Uruguay”.

En cuanto a los próximos meses, el pronóstico del SMN no es muy alentador, ya que avizora precipitaciones menores a la media de este período anual, por lo que se viene un invierno seco en esta zona del país.

De acuerdo al pronóstico climático trimestral del Servicio Meteorológico Nacional para los meses de mayo, junio y julio, se espera que gran parte de la región afectada, en especial la mesopotamia, presente precipitaciones menores a la media de este período. En su último informe especial, el organismo nacional aclara que en el caso de las provincias de Santa Fe, el Chaco y Formosa, no hay ninguna categoría de lluvias (superior, normal o inferior) que tenga mayor probabilidad de ocurrencia.
Fuente: El Once

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