El testimonio del trabajador, llamado Sebastián, es clave para entender lo que sucede en el Campo del Abasto, lugar en donde el pasado sábado una persona perdió la vida al ser apretado por uno de los camiones volcadores. “El tema es muy complicado”, indicó. “Es algo que viene sucediendo desde hace muchos años y pareciera que nunca va a terminar”, relató al tiempo que agregó que “hay mucha gente y es muy complicado para nosotros maniobrar. Como chofer se nos hace muy complicado hacer nuestro trabajo”.
Pedido a las autoridades
Además, Sebastián remarca que la gente “ya conoce nuestros horarios. Cuando llegamos con los camiones, aparecen de todos lados” y destaca un dato más que preocupate: “Hay grandes y hay menores, de todas las edades”.“No es el primer accidente que ha ocurrido y Dios quiera sea el último el del sábado. Hace años que venimos pidiendo a las autoridades que vean la forma de mejorar esa situación”, expresó.
“Nosotros vamos metiendo el camión de culata al volcado y la gente se cuelga, esperando que se levante la tolva, para agarrar las bolsas lo más rápido posible”, contó.
Y remarcó que, desde su lugar, “no podemos hacer nada porque la gente misma se pone en contra, ya nos han tirado piedras, roto los parabrisas. No hay nadie que controle los volcados y es el reclamo que venimos haciendo”.
Seguridad
En cuanto a la presencia policial y del área de Seguridad de la Municipalidad, el mismo indicó que “policías hay, pero generalmente están donde están haciendo la parte nueva de El Abasto, no en el volcado, miran a 200 o 300 metros”.“No están para despejar la gente y que no se suban a los camiones y la verdad que no sé si es su trabajo, si les corresponde a ellos”, sostuvo y agregó que del área de Seguridad Municipal, “en el volcado, no he visto”.
Por último afirmó que no están en contra de la gente que va al lugar sino que piden “hacer nuestro trabajo, que haya seguridad para que no pase lo que pasó el sábado. Por 15 días no van a subir a los camiones pero después vuelven a hacer lo mismo”.
