Este hombre el día anterior se habría ausentado de su domicilio, regresando en horas de la noche encontrando todo normal. Luego, en horas de la madrugada, alrededor de las 4, cuando buscaba su linterna notó que le faltaba una escopeta calibre 16 y una carabina 22 largo. El propio damnificado refirió que, quien le había robado, debía conocer los movimientos de su hogar, por cuanto no había nada roto ni desordenado.
Los uniformados, tras conocer la noticia, comenzaron con las tareas investigativas. Pasadas las 5 de la madrugada, localizaron al nieto del damnificado, de 14 años, quien estaba junto a un amigo, de 18 años. En ese momento supieron que las armas habrían sido vendidas a otro vecino, de 22 años de edad en $ 1.600, por parte de éstos dos.
Lo ocurrido fue comunicado a la Dra. María Occhi, Fiscal Auxiliar, procediéndose al secuestro de las armas. El menor, por disposición de la Fiscalía, fue entregado a su progenitor, en tanto que el mayor fue trasladado a Jefatura de Policía para ser debidamente identificado.
Los actuados y secuestros fueron puestos a disposición de la Justicia.
