Al parecer, los nuevos dueños mantendrían una disputa con el gobierno por ver a quién corresponde cubrir el dinero que se adeuda y cuáles son los intereses con que se debería abonar, teniendo en cuenta la inflación en el tiempo transcurrido. Si bien a comienzos del año pasado el frigorífico estaba todavía en manos del Estado y en menor porcentaje de empresarios locales, Cartipam S.A. y Premier S.A. todavía no habrían cancelado la operación de compra, lo que alimenta la polémica de quién es el responsable ahora de desembolsar lo que se debe a los trabajadores.
Por otra parte, cabe aclarar que desde su asunción, los flamantes compradores efectúan el pago de haberes a sus empleados en tiempo y forma.